Apegados a la ley, los taurinos le respondieron al Alcalde, quien propuso que la fiesta brava no incluya la muerte del animal.
"Mientras haya una ley que reglamente los toros y que incluya la muerte del toro en las corridas, nosotros las seguiremos haciendo así. El día que la ley cambie miraremos alternativas".
De esta forma, el director ejecutivo de Cormacarena, Santiago Tobón Echeverri , le salió al paso a la propuesta del alcalde de Medellín, Aníbal Gaviria Correa, de que la fiesta brava no incluya crueldad ni la muerte del animal.
Tras expresar respeto por la decisión del alcalde de Bogotá, Gustavo Petro , de suspender las corridas en la plaza La Santamaría para destinar el espacio a programas culturales y educativos, Gaviria anunció que buscará un acuerdo con los taurinos de Medellín para implementar las "corridas incruentas" que, apuntó, "se están implementando en parte de Estados Unidos y en Europa" y "permiten que se mantengan la belleza y plasticidad del toreo".
También dijo el mandatario que su administración no patrocinará la feria taurina.
Tobón Echeverri expresó la posición de Cormacarena, pero aclaró que, cuando el mandatario les oficialice la propuesta, la analizarán y dialogarán con él. Y sobre la negativa de apoyarlos financieramente, respondió que el panorama no cambia: "Desde hace nueve años la Administración no nos da un peso".
El directivo de Cormacarena expresó su sorpresa por la postura del Alcalde porque, "cuando fue gobernador nos ayudó".
En el mismo sentido se pronunció Federico Mesa, presidente de Asotauro: "Aníbal sabe qué es la feria taurina. Lo de ahora es más politiquería que otra cosa".
El gobernante argumentó que en el Plan de Desarrollo, "que está muy vinculado a la vida, defendemos los animales. Que no haya crueldad con los toros ni con ningún otro animal".
Paulina Pulgarín , de Anima Naturalis, consideró que, "aunque para Aníbal Gaviria esta es una alternativa viable, nosotros pedimos es la abolición de las corridas porque, al fin y al cabo, matan el toro detrás de bastidores".
"Los animales no deben ser sujetos de explotación y una corrida incruenta es como un circo con animales", agregó la ambientalista y anotó que es preferible que el toro se muera de viejo.
Federico Mesa , entretanto, argumentó: "Al toro hay que sacrificarlo porque no queda sirviendo para nada después de una lidia. Lo que no nos gusta es la doble moral. ¿Que no se mate el toro en el ruedo pero sí en los corrales donde no se puede defender?"
PARA SABER MÁS
NO TRAERÍAN LA FERIA DE BOGOTÁ
Santiago Tobón, director ejecutivo de Cormacarena, descartó que la feria de Bogotá sea traída a Medellín, como lo propusieron algunos aficionados de la tauromaquia, tras el anuncio del alcalde de la capital, Gustavo Petro, de suspender las corridas en La Santamaría. El directivo manifestó que es difícil que en Medellín se adopte una decisión similar pues "el alcalde es muy respetuoso de la ley" y, a diferencia de Bogotá, donde el escenario es del Distrito, aquí la empresa privada es dueña de la mayor proporción de La Macarena. De acuerdo con Cormacarena, 50.000 personas asistieron a la pasada edición de la fiesta brava en Medellín.
A FAVOR
HORMONAS DEL TORO ANESTESIAN
Juan Carlos Illera, profesor de Fisiología Animal de la Universidad Complutense de Madrid, dice que "los toros de lidia liberan una gran cantidad de hormonas que bloquean el dolor en pocos segundos. Un toro libera cuarenta veces más hormonas que las que liberan las mujeres durante el parto para aplacar el dolor".
EN CONTRA
NO NEUTRALIZAN EL DOLOR DEL ANIMAL
José Enrique Zaldívar, del Colegio de Veterinarios de Madrid, ha expuesto que en ningún estudio científico se atribuye a las hormonas betaendorfinas la capacidad de neutralizar el dolor. "En el 90% de ellos se las atribuye la capacidad contraria".