Adjudicación se cayó en junio 13. Faltan 25 casas por demoler de las 1.800 del área de impacto.
El próximo 13 de septiembre se debe estar adjudicando la construcción de los 4.1 kilómetros de vía que conectará Medellín y el Valle de Aburrá con el Túnel de Occidente Fernando Gómez Martínez, anunció el secretario de Infraestructura departamental, Mauricio Valencia Correa.
Pasado este trámite, los trabajos se estarían iniciando a fines del mismo mes, lo que desentrabaría esta obra, que sufrió un retraso en el cronograma debido a que el pasado 13 de junio fue revocada la adjudicación de un contrato de mantenimiento y de 5 procesos de licitación debido a que ninguno de los proponentes cumplía con las exigencias establecidas en el pliego de condiciones, según se explicó en el momento.
Valencia informó que el pasado 30 de julio se colgaron en la red los pliegos definitivos y el jueves hubo una audiencia de aclaración con los distintos proponentes que desean participar en el proceso.
"Con la empresa Konfirma, que ha mostrado experiencia, idoneidad y mucho éxito en el tema de las Autopistas de la Prosperidad, estamos desarrollando todo el proceso previo de evaluación", que incluye las 5 licitaciones de mantenimiento que se cerraron y cuyo costo es superior a los 180.000 millones de pesos", subrayó el secretario.
Consultado sobre si la firma a la que se le revocó la adjudicación puede participar, respondió que sí, pero que no sabe ni tiene porqué saberlo, si está o no participando.
En cuanto a los 5 contratos de mantenimiento, que comprometen vigencias futuras por 3 años, la adjudicación se hará los días 21 y 22 de agosto.
En su momento, el director de la Cámara Colombiana de Infraestructura de Antioquia, José Fernando Villegas, cuestionó la exigencia de requisitos casi imposibles de cumplir, lo que podría incidir en un estancamiento de los grandes proyectos en la región.
El diputado Juan Esteban Villegas, del Partido Conservador, fue más allá y pidió sanciones para los responsables de que haya sido necesaria la revocatoria.
Según planteó, el problema trasciende el simple hecho de que se decida el reinició del proceso, "pues esto genera sobrecostos y retrasos".
La obra, de por sí, ya lleva un retraso de cinco años.
ANTECEDENTES
COMUNIDAD DE LA IGUANÁ, SATISFECHA
Un capítulo fundamental de esta obra es la afectación a la comunidad de la quebrada La Iguaná. Según el concejal Jesús Aníbal Echeverri, que lidera una comisión que le hace seguimiento al proyecto, esta comunidad está satisfecha por los avances en las compensaciones. En los barrios aledaños se construirán una cancha sintética en Blanquizal, dos puentes peatonales en El Pesebre-Masavielle y Jardín-Olaya y dos vehiculares en Blanquizal y Las Margaritas-San Cristóbal. De las 1.800 casas por derruir restan 25 y sólo un propietario tiene demanda.