Salieron desde Vizcaya, la Terminal del Norte y Santa Gema para manifestarse en contra de la restricción de la movilidad.
Tres caravanas de motociclistas confluyeron ayer a las 6:00 p.m. frente a La Alpujarra. Más de 500 usuarios de moto acompañaron a cuatro carros funébres con los que quisieron representar la situación que para ellos implica la prolongación de la restricción al parrillero hombre.
"Estamos muertos para las autoridades", señaló Jonathan Osorio, integrante de Motociclistas Asociados de Colombia.
Los participantes de la manifestación partieron desde Vizcaya, la Terminal del Norte y Santa Gema, para encontrarse en la sede de la Administración Municipal. Algunos participantes consideraron que la contemplación de excepciones por parentesco restó concurrencia.
Ante los constantes reclamos de los motociclistas, la Alcaldía de Medellín acogió la excepción de parentesco en la restricción del parrillero hombre. De esta manera el padre, el hermano o el hijo de quien conduce la moto podrá ser su acompañante, acreditando el parentesco con su documento de identidad.
La medida restrictiva se extendió hasta el 31 de enero del 2014, según el acuerdo al que llegaron todos los alcaldes del Valle de Aburrá en el consejo de seguridad del 8 de julio pasado, reunión a la cual asistió el presidente Juan Manuel Santos.
Según el secretario de Seguridad de Medellín, Arnulfo Serna, la excepción se tomó atendiendo sobre todo la petición de algunos motociclistas para poder transportar a sus hijos entre la casa y el colegio.
Los alcaldes de Envigado y Girardota ya venían permitiendo la movilización de padres, hermanos o hijos como parrilleros. En municipios como Bello, Itagüí y Sabaneta, la medida continúa sin excepciones.
OPINIONES
LA EXCEPCIÓN ES UNA SOLUCIÓN A MEDIAS
ROBERTO CARDONA ÁLVAREZ
Concejal de Medellín
"He venido insistiendo permanentemente en que esta prohibición es una limitación a la libre circulación y al trabajo. Con estas medidas queda demostrado que las autoridades no tienen la capacidad de controlar las conductas delictivas de unos pocos ciudadanos que utilizan la moto para realizar sus fechorías. Las acciones deben ser preventivas y no restrictivas. No podemos ver en todo parrillero un potencial delincuente. No podemos ver en todo motociclista un enemigo de los ciudadanos".