Sus habitantes desean que siga siendo uno de los barrios más tranquilos y verdes de Medellín.
Por culpa del crecimiento urbanístico de la ciudad, Pilarica dejó de ser desde hace algunos años el barrio verde, de casas grandes, bellas, atractivas y admiradas por los medellinenses.
Hasta hace 15 años, antes de iniciarse el auge de la construcción en ese sector noroccidental de Medellín, Pilarica era: 36 caserones levantados en la década del 50, de bella arquitectura, con áreas entre 1.000 y 1.200 metros cuadrados, los cuales contaban con amplias zonas verdes y algunos con piscinas.
Una vez esos lotes empezaron a darle paso a complejos de apartamentos, a muchos de los propietarios se les acabó la tranquilidad que les ofrecía el lugar y optaron por vender. Hoy, según uno de sus habitantes, sólo quedan 12 o 13 de esas casas y muchas ya tienen carteles de se vende.
Alonso Correa , un hombre cincuentón y habitante toda la vida de Robledo recordó que cuando caminaba con su padre por ese sector admiraban la belleza natural del sitio lleno de árboles frutales y aves de toda clase. "Hacia los años 50 empezaron a aparecer las casas quintas y nos llamó la atención la arquitectura moderna con que las hicieron. Creo que el crecimiento de la ciudad no va a dejar ni una sola de esas casas que identificaron siempre a Pilarica y en unos cinco años solo quedarán las fotos y los recuerdos", comentó.
Un comerciante del barrio, que aún conserva uno de esos caserones, dijo que los fundadores se han tenido que ir acosados por las construcciones de altos edificios, la falta de vías, las congestiones y la inseguridad.
Anotó que lo primero que desaparece cuando tumban estas joyas de la arquitectura es que talan entre 15 y 25 árboles, luego vienen los vehículos pesados, las vías hechas parqueaderos, el ruido y de cada casa emergen entre 20 y 30 apartamentos. "Esto ha hecho aburrir a los vecinos y por eso nos vemos obligados a dejar estas verdaderas joyas de la arquitectura antioqueña", se lamenta el hombre.
Hoy hay en Pilarica unas 40 unidades habitacionales y en construcción otras seis.
Para hacerle frente a los problemas de inseguridad y el crecimiento desmedido en un barrio que tiene pocas aceras, la iluminación es escasa y las vías son las mismas de hace 60 años, los pocos habitantes que aún quedan en los caserones y quienes ocupan las unidades residenciales crearon la Mesa de Trabajo por el Bienestar de Pilarica.
En materia de seguridad, voceros de esta mesa indicaron que en el barrio nadie se atreve a salir por el asedio de jaladores de vehículos y raponeros que, en la mayoría de casos, utilizan motocicletas.
Agregaron que también esperan llamar la atención de las autoridades para que se controlen las licencias de construcción, ya que la infraestructura del barrio no permite el aumento desmedido de la población por la estrechez de las vías, la falta de aceras y el deterioro ecológico.
El teniente Mauricio Bayén , subcomandante de la estación de Policía de Castilla, dijo que en cuanto a la seguridad la institución ha hecho grandes esfuerzos por mantener la tranquilidad de Pilarica, que aunque no tiene una problemática directa por presencia de bandas delincuenciales, sí presenta el asedio de sectores vecinos donde hay combos que tratan de extender sus acciones.
Añadió que sí están enfrentando a los raponeros, atraídos por la vasta zona estudiantil aledaña y para ello se cuenta con una patrulla de servicio especial.
Aunque la construcción borró gran parte de su historia, Pilarica no quiere desaparecer en medio del cemento y sus habitantes esperan conservar lo poco que les queda.
OPINIONES
PLAN DE SEGURIDAD BARRIO POR BARRIO
Jair Jiménez
Subsecretario de Operaciones de la Secretaría de Seguridad
La Secretaría de Seguridad viene haciendo un plan especial comuna por comuna y en este sector de Rinconcito Ecuatoriano y del Hospital Pablo Tobón Uribe ya empezamos a hacer un plan especial para enfrentar la delincuencia y estamos ya rodeando Pilarica. También estamos identificando los centros de consumo y para ello se estudia con la Policía cómo mejorar las condiciones de convivencia. Estamos hablando con la comunidad barrio por barrio.
EN DEFINITIVAPilarica quiere volver a ser el barrio tranquilo y sosegado que lo caracterizó como uno de los sectores más llamativos de Medellín. Sus habitantes se unieron para hacerle frente a los problemas.