Autoridades señalan falta de cultura ciudadana y recalcan riesgos de hablar por móvil y mirar el teclado.
El hábito de hablar por celular mientras se conduce, no parece inquietar sobre los riesgos a sus protagonistas, pues en los siete meses que van del año, a casi 6.000 ciudadanos les han impuesto comparendo.
El comportamiento preocupa a las autoridades, pues ello demuestra falta de conciencia ciudadana, aunque no se tienen registros en Medellín de la incidencia directa entre hablar por celular al volante y accidentes.
Según el subsecretario de Control de Tránsito, Carlos Marín, el número exacto de comparendos era de 5.990 hasta el 30 de julio, cifra representativa, pero que se queda corta, dado que los guardas no alcanzan a informar a todos los conductores que cometen la infracción.
La razón es simple: del total de 532 agentes, apenas quedan 110 por turno para atender la ciudad y cinco corregimientos. "Los infractores son más, pero no se alcanza a sancionar a todos. Con ese grupo toca atender la movilidad y un promedio de 220 accidentes diarios, entre sólo daños y con lesiones", advirtió.
Su reflexión es que los ciudadanos deben usar el manos libres o no hablar mientras conducen, porque requieren concentrar los sentidos. Al menor descuido se puede ocasionar un accidente y hasta perder la vida.
Un estudioso en temas de tránsito y movilidad, Rodrigo Salazar, consideró que las autoridades podrían montar un programa educativo, no campaña, de mucho impacto y bajo costo, si en todas las entradas al área metropolitana se instalan vallas que adviertan que en el Valle de Aburrá no se tolera manejar y hablar por celular, porque es un problema de toda la región.
Si se requiere hablar, anotó, hoy la tecnología permite hacerlo sin soltar las manos del volante, o es preferible orillarse para atender la llamada. Claro que el subsecretario Carlos Marín observó que si un conductor se estaciona para hablar y obstruye la movilidad, también se expone a un comparendo.
Pero no solo el celular es un riesgo, añadió Salazar, porque algunas concesionarias ya entregan el vehículo nuevo con un navegador, especie de GPS, que supone otro riesgo al abandonar los ojos de la carretera y dirigirlos a la pantalla.
Ah, y recibir una mala noticia -advirtió- nos puede dañar el carácter al volante.
Claves
SI LO LLAMAN, ABSTÉNGASE O PAGUE
1. Una propuesta del experto es que el conductor se instale el manos libres siempre, antes de encender el vehículo.
2. Hasta el mes pasado, los accidentes registrados por el Tránsito de Medellín sumaban casi 20.000 casos.
El hábito de hablar por celular mientras se conduce, no parece inquietar sobre los riesgos a sus protagonistas, pues en los siete meses que van del año, a casi 6.000 ciudadanos les han impuesto comparendo.
El comportamiento preocupa a las autoridades, pues ello demuestra falta de conciencia ciudadana, aunque no se tienen registros en Medellín de la incidencia directa entre hablar por celular al volante y accidentes.
Según el subsecretario de Control de Tránsito, Carlos Marín, el número exacto de comparendos era de 5.990 hasta el 30 de julio, cifra representativa, pero que se queda corta, dado que los guardas no alcanzan a informar a todos los conductores que cometen la infracción.
La razón es simple: del total de 532 agentes, apenas quedan 110 por turno para atender la ciudad y cinco corregimientos. "Los infractores son más, pero no se alcanza a sancionar a todos. Con ese grupo toca atender la movilidad y un promedio de 220 accidentes diarios, entre sólo daños y con lesiones", advirtió.
Su reflexión es que los ciudadanos deben usar el manos libres o no hablar mientras conducen, porque requieren concentrar los sentidos. Al menor descuido se puede ocasionar un accidente y hasta perder la vida.
Un estudioso en temas de tránsito y movilidad, Rodrigo Salazar, consideró que las autoridades podrían montar un programa educativo, no campaña, de mucho impacto y bajo costo, si en todas las entradas al área metropolitana se instalan vallas que adviertan que en el Valle de Aburrá no se tolera manejar y hablar por celular, porque es un problema de toda la región.
Si se requiere hablar, anotó, hoy la tecnología permite hacerlo sin soltar las manos del volante, o es preferible orillarse para atender la llamada. Claro que el subsecretario Carlos Marín observó que si un conductor se estaciona para hablar y obstruye la movilidad, también se expone a un comparendo.
Pero no solo el celular es un riesgo, añadió Salazar, porque algunas concesionarias ya entregan el vehículo nuevo con un navegador, especie de GPS, que supone otro riesgo al abandonar los ojos de la carretera y dirigirlos a la pantalla.
Ah, y recibir una mala noticia -advirtió- nos puede dañar el carácter al volante.
Claves
SI LO LLAMAN, ABSTÉNGASE O PAGUE
1. Una propuesta del experto es que el conductor se instale el manos libres siempre, antes de encender el vehículo.
2. Hasta el mes pasado, los accidentes registrados por el Tránsito de Medellín sumaban casi 20.000 casos.