La Secretaría de Movilidad no tiene intención, en el corto plazo, de instalar parquímetros en el estadio: "Ni este año ni en los primeros meses de 2014 tenemos proyectado ubicar zonas de estacionamiento regulado en ese lugar", indicó el secretario de Movilidad, Omar Hoyos Agudelo, aunque no descartó que a mediano plazo se adopte la medida.
El funcionario respondió así a un derecho de petición enviado a su despacho por un grupo de visitantes de la Unidad Deportiva Atanasio Girardot, quienes se quejan de los impactos económicos negativos que tendría para ellos el cobro del parqueo.
Los firmantes del derecho solicitan abortar cualquier intención de ubicar estas estructuras de cobro, ya que esto los alejaría del lugar, pues la mayoría son deportistas o padres que van a acompañar a sus hijos a sus prácticas.
Dicen que por años no han pagado por ubicar sus vehículos sino que, "colaboramos voluntariamente a unas personas que nos los cuidan". Se trata de informales que vigilan los carros en los estacionamientos callejeros, pero no tienen un cobro de cuota fija.
"Ellos (los dueños de los carros) nos dan lo que quieren, a veces monedas, y nosotros les cuidamos los carros", comenta José Otoniel Agudelo, que lleva 18 años en esta labor.
Explica que además de él, en la misma función se desempeñan otras seis personas, dos en la mañana y cinco en la tarde y noche.
"Acá empieza a llegar gente desde las 5:00 de la mañana y yo siempre madrugo a esa hora. Nunca ha habido problemas", precisó Otoniel.
Las zonas donde la gente suele dejar sus autos al cuidado de estas personas son el Parque del Ajedrez, las piscinas olímpicas y las canchas de tenis.
De un pago promedio de 1.000 pesos por varias horas o un día, los usuarios pasarían a cancelar, con los parquímetros, cuotas de más de 2.500 la hora, lo que los obligaría a retirarse del escenario, dicen.
Sol Velásquez, habitante de Laureles, advierte: "No entendemos cómo la Alcaldía va a poner parquímetros en la Liga de Natación cuando allá vamos adultos mayores, mujeres con niños y discapacitados que necesitamos parquear".
Pero pese al parte de tranquilidad que da Hoyos, la opción no está descartada: "Hay solicitudes de otras personas para instalar parquímetros, contrarias a los del derecho de petición", confirmó.
Y aclaró que sí se han hecho mediciones, porque es función de su oficina hacer inventario de los posibles lugares donde podrían instalarse los parquímetros, que son "la única forma de regular para que las personas no parqueen todo el día su carro particular obstruyendo la vía pública".
El funcionario respondió así a un derecho de petición enviado a su despacho por un grupo de visitantes de la Unidad Deportiva Atanasio Girardot, quienes se quejan de los impactos económicos negativos que tendría para ellos el cobro del parqueo.
Los firmantes del derecho solicitan abortar cualquier intención de ubicar estas estructuras de cobro, ya que esto los alejaría del lugar, pues la mayoría son deportistas o padres que van a acompañar a sus hijos a sus prácticas.
Dicen que por años no han pagado por ubicar sus vehículos sino que, "colaboramos voluntariamente a unas personas que nos los cuidan". Se trata de informales que vigilan los carros en los estacionamientos callejeros, pero no tienen un cobro de cuota fija.
"Ellos (los dueños de los carros) nos dan lo que quieren, a veces monedas, y nosotros les cuidamos los carros", comenta José Otoniel Agudelo, que lleva 18 años en esta labor.
Explica que además de él, en la misma función se desempeñan otras seis personas, dos en la mañana y cinco en la tarde y noche.
"Acá empieza a llegar gente desde las 5:00 de la mañana y yo siempre madrugo a esa hora. Nunca ha habido problemas", precisó Otoniel.
Las zonas donde la gente suele dejar sus autos al cuidado de estas personas son el Parque del Ajedrez, las piscinas olímpicas y las canchas de tenis.
De un pago promedio de 1.000 pesos por varias horas o un día, los usuarios pasarían a cancelar, con los parquímetros, cuotas de más de 2.500 la hora, lo que los obligaría a retirarse del escenario, dicen.
Sol Velásquez, habitante de Laureles, advierte: "No entendemos cómo la Alcaldía va a poner parquímetros en la Liga de Natación cuando allá vamos adultos mayores, mujeres con niños y discapacitados que necesitamos parquear".
Pero pese al parte de tranquilidad que da Hoyos, la opción no está descartada: "Hay solicitudes de otras personas para instalar parquímetros, contrarias a los del derecho de petición", confirmó.
Y aclaró que sí se han hecho mediciones, porque es función de su oficina hacer inventario de los posibles lugares donde podrían instalarse los parquímetros, que son "la única forma de regular para que las personas no parqueen todo el día su carro particular obstruyendo la vía pública".