Alcalde de San Andrés de Cuerquia les salió al paso a estas declaraciones y añadió que no todos los que están en la Universidad son mineros. Ya son seis meses de ocupación.
Como un campo de refugiados de guerra: así se ve hoy el coliseo de la Universidad de Antioquia en el que hacinadas en carpas permanecen desde hace seis meses 400 personas que se presentan como desplazadas por el proyecto Hidroituango.
Camilo Rodríguez, estudiante de la Facultad de Derecho, dijo que la situación para estas familias es muy difícil y deben recurrir a la caridad del estudiantado para su alimentación, aseo y manutención.
Aquí, relató, "hay personas de edad y ya murió una señora de 60 años que era sola. Se cayó de espaldas y se golpeó el cráneo y aunque recibió oportuna atención médica, falleció el fin de semana pasado".
Una de las líderes, Isabel Cristina Zuleta, vocera en Antioquia de Ríos Vivos, indicó que el retorno depende de la voluntad de los alcaldes.
Especificó que con la mediación de la Defensoría del Pueblo y con la Gobernación y Empresas Públicas de Medellín estuvieron a punto de un acuerdo para dejar la U. de A., pero los mandatarios de los 10 municipios de la zona de influencia del megaproyecto dijeron que no tienen capacidad de acondicionarles albergues, dado que la mayoría no tiene vivienda a la cual retornar, porque fueron desalojados de donde realizaban la minería ancestral.
Agregó que con la Defensoría se estudia la revisión de los casos de los afectados con la respectiva documentación, porque las reclamaciones no responden a las afectaciones que la población vive.
En cuanto a la mesa de derechos humanos instalada recientemente en Ituango pidió que no sea solo para discutir sino también para soluciones. "Nos han pisoteado todos los derechos civiles y políticos y en este momento 19 personas estamos judicializadas", dijo.
Manifestó que la semana pasada falló una tutela, en la cual se le solicita a la Unidad Nacional de Protección, Gobernación y el Ministerio de Medio Ambiente que les brinde medidas de protección para ejercer el derecho a la protesta social y a la oposición política.
"Nos oponemos a un megaproyecto y no se han pronunciado y el tiempo de la tutela se cumple mañana jueves", advirtió.
Responde alcalde
El alcalde de San Andrés de Cuerquia, Óscar Sepúlveda, negó que se opongan al retorno y afirmó que ya le dijeron a la Gobernación y a organismos de derechos humanos que no tienen los medios ni los sitios para albergar a estas personas y que en el caso de su municipio solo cuenta con un coliseo y tendría que parar siete programas que ofrecen allí.
"Propongo que retornen a sus viviendas, porque casi todos tienen donde vivir en los pueblos y es falso que los hayan sacado de sus casas, porque los de San Andrés no vivían en las riberas del Cauca que entre otras cosas pertenecen es a Toledo", recalcó.
Denunció que en este movimiento hay oportunistas, gente que buscaba oro, pero solo cuando se terminaba la cosecha de café se iban a "miniar", a los ríos Cauca y San Andrés.
"Reclaman el derecho a ser mineros, pero se volvieron mineros cuando iban a construir el proyecto, porque tenemos varios censos que indican que apareció gente de todas partes a reclamar", dijo el alcalde.
DICEN DE...
MUY PERJUDICADA LA UNIVERSIDAD
El vicerrector general de la U. de A., John Arboleda, dijo que con la Gobernación se busca un acuerdo para la liberación del coliseo, pero falta que los municipios den el albergue. Estaba todo listo, pero se atravesó el paro agrario. Advirtió costos para la U. de A.: no han inaugurado el nuevo coliseo y no han derribado el que ocupan y es parte del contrato. Allí habrá placas polideportivas. Se suma el perjuicio para actividades académicas, algunos daños y que entre ellos se han presentado riñas.
EN DEFINITIVAHace dos semanas estuvo a punto de firmarse un acuerdo para que los campesinos retornaran a sus localidades, pero el paro agrario se atravesó y lo impidió. Se siguen buscando soluciones.