Un año después del concepto del Consejo de Estado y la salida de ISA, el proyecto avanza y se consolida.
Menos tiempo en el cronograma de construcción y una distribución de la responsabilidad del riesgo, son ganancias con el cambio del esquema, al cumplirse un año del retiro de Interconexión Eléctrica (ISA), de la ejecución de Autopistas de la Prosperidad.
Esta es la percepción del gerente del megaproyecto, Federico Restrepo Posada, al reflexionar sobre las consecuencias del concepto del Consejo de Estado (acogido por el Gobierno Nacional), que frenó la continuidad de ISA.
La decisión, afirmó, tuvo sus pros y contras, y uno en en favor de ISA es su prestigio, eficiencia y reconocimiento en el desarrollo de proyectos lineales, a raíz de su participación en concesiones en Chile.
Pero observó que los cronogramas y costos del proyecto en términos de la rentabilidad que se tenía con ISA, serán de cinco o seis años, como se plantea hoy, y no de 11 años.
Y como estaba establecida la responsabilidad sobre los riesgos, observó que era mucho más vulnerable a los intereses de la Nación, frente a lo que se presenta hoy en los esquemas de cuarta generación.
¿Pero se gana en tiempo de ejecución? Restrepo lo asegura, porque con el cronograma con ISA el proyecto iría hasta 2023 o 2024, mientras que ahora tienen que estar terminadas todas las obras en 2020.
Lo explicó porque ISA lo acomodaba a flujos, más a un cronograma financiero que uno técnico. "A ISA no se le estaban pidiendo los anticipos que se piden hoy a los concesionarios que tienen que poner el 20% de los costos de inversión como capital para ejecución de sus proyectos", anotó.
¿Y repartirlo en varias concesiones ayuda? Apreció que para ISA era un esfuerzo muy grande, pues se trata de 7.200 millones de dólares de inversión, recursos muy altos que incluso superan su propio patrimonio en algunos casos, puestos en un solo proyecto.
Aquí, añadió, revestía una serie de riesgos, algo que posiblemente podía inquietar al Gobierno.
Al repartir el megaproyecto en varias concesiones, admitió, los riesgos quedan mucho más controlables, pues "una cosa es que saque la mano un contratista para desarrollar 900 kilómetros que valen 7.200 millones de dólares, o que la saque uno de 500 millones de dólares".
En esa perspectiva, el concejal Luis Bernardo Vélez expresó que el proyecto tampoco avanzó cuando estaba en manos de ISA. Y aunque estimó que el avance ha sido lento, dijo que tiene gran optimismo porque está en cabeza de un hombre diligente y conocedor del tema, como Federico Restrepo, que le da esperanza de que por fin avance.
OPINIONES
ES UNA PÉRDIDA QUE ISA NO CONTINUARA
En 2009 fui coordinador de ponentes del proyecto que aprobó el aporte del Municipio de 400.000 milllones, y una de las grandes razones era que ISA estaba de por medio. Desde cualquier punto de vista es una pérdida para el proyecto y ojalá no signifique que se haya perdido tanto tiempo desde ese momento. Preocupa que de las esas vigencias futuras ya no se apropiaron las de 2010 al 2013. Pero genera tranquilidad que una persona como Federico Restrepo esté al frente del mismo. Hoy lo único que queremos es que se haga bien.
Menos tiempo en el cronograma de construcción y una distribución de la responsabilidad del riesgo, son ganancias con el cambio del esquema, al cumplirse un año del retiro de Interconexión Eléctrica (ISA), de la ejecución de Autopistas de la Prosperidad.
Esta es la percepción del gerente del megaproyecto, Federico Restrepo Posada, al reflexionar sobre las consecuencias del concepto del Consejo de Estado (acogido por el Gobierno Nacional), que frenó la continuidad de ISA.
La decisión, afirmó, tuvo sus pros y contras, y uno en en favor de ISA es su prestigio, eficiencia y reconocimiento en el desarrollo de proyectos lineales, a raíz de su participación en concesiones en Chile.
Pero observó que los cronogramas y costos del proyecto en términos de la rentabilidad que se tenía con ISA, serán de cinco o seis años, como se plantea hoy, y no de 11 años.
Y como estaba establecida la responsabilidad sobre los riesgos, observó que era mucho más vulnerable a los intereses de la Nación, frente a lo que se presenta hoy en los esquemas de cuarta generación.
¿Pero se gana en tiempo de ejecución? Restrepo lo asegura, porque con el cronograma con ISA el proyecto iría hasta 2023 o 2024, mientras que ahora tienen que estar terminadas todas las obras en 2020.
Lo explicó porque ISA lo acomodaba a flujos, más a un cronograma financiero que uno técnico. "A ISA no se le estaban pidiendo los anticipos que se piden hoy a los concesionarios que tienen que poner el 20% de los costos de inversión como capital para ejecución de sus proyectos", anotó.
¿Y repartirlo en varias concesiones ayuda? Apreció que para ISA era un esfuerzo muy grande, pues se trata de 7.200 millones de dólares de inversión, recursos muy altos que incluso superan su propio patrimonio en algunos casos, puestos en un solo proyecto.
Aquí, añadió, revestía una serie de riesgos, algo que posiblemente podía inquietar al Gobierno.
Al repartir el megaproyecto en varias concesiones, admitió, los riesgos quedan mucho más controlables, pues "una cosa es que saque la mano un contratista para desarrollar 900 kilómetros que valen 7.200 millones de dólares, o que la saque uno de 500 millones de dólares".
En esa perspectiva, el concejal Luis Bernardo Vélez expresó que el proyecto tampoco avanzó cuando estaba en manos de ISA. Y aunque estimó que el avance ha sido lento, dijo que tiene gran optimismo porque está en cabeza de un hombre diligente y conocedor del tema, como Federico Restrepo, que le da esperanza de que por fin avance.
OPINIONES
ES UNA PÉRDIDA QUE ISA NO CONTINUARA
En 2009 fui coordinador de ponentes del proyecto que aprobó el aporte del Municipio de 400.000 milllones, y una de las grandes razones era que ISA estaba de por medio. Desde cualquier punto de vista es una pérdida para el proyecto y ojalá no signifique que se haya perdido tanto tiempo desde ese momento. Preocupa que de las esas vigencias futuras ya no se apropiaron las de 2010 al 2013. Pero genera tranquilidad que una persona como Federico Restrepo esté al frente del mismo. Hoy lo único que queremos es que se haga bien.