Se trata de un explosivo artesanal que usa la minería informal y que ha causado intoxicaciones y casos de quemados.
Con un leve trauma de cráneo, contusiones y síntomas de asfixia por inhalación de monóxido de carbono ingresó el pasado lunes al hospital San Antonio, de Buriticá, un hombre de unos 40 años, nueva víctima del llamado en esa población "polvo loco".
Este elemento es un explosivo artesanal utilizado en las minas informales para reemplazar la dinamita Indugel, que solo es vendida por el Ejército a las explotaciones con título minero.
A este accidente se suman otros tres ocurridos hace ocho días: un minero sufrió severas quemaduras y fue remitido a Medellín y otros dos fueron afectados por el monóxido de carbono CO, que expele el "polvo loco" y que tiene en apuros el precario sistema de salud de Buriticá, cuya población ha crecido por el auge minero del oro.
Sin logística ni personal
Según la enfermera jefe del Hospital, Vanessa Murillo, desde que en febrero empezaron a detectar el problema han atendido a 23 pacientes por inhalación de CO. Comentó que en su hospital tienen un plan de contingencia, pero advirtió que, en caso de una emergencia, carecen de espacio, personal y logística: de 23 empleados, sólo hay dos médicos, una enfermera jefe y 5 auxiliares enfermeras.
El coronel Gustavo Chavarro, comandante de la Policía Antioquia, confirmó que conoce el uso de este explosivo, al que llama "dinamita casera", porque le reportaron un caso de un minero que perdió una mano al utilizarla en una mina de Frontino.
Según sus investigaciones, se trata de una sustancia elaborada con azúcar pulverizada, a la que le añaden azufre y otros elementos. Anotó que aún no conocen sus componentes y no saben cómo controlarla, por lo que designó un grupo especial de la Sijín y la Sipol para investigar el tema y saber de sus peligros para la salud.
"El estricto control al tráfico de dinamita y las restricciones legales para el expendio del explosivo lleva a que la minería ilegal recurra a estas sustancias", señaló.
Este año, la policía de Buriticá ha decomisado 200 kilos de esta pólvora, que eran transportados en buses intermunicipales en encomiendas, lo que pone en peligro a los pasajeros.
Un agente advirtió que por los controles, la están introduciendo por otros sistemas.
Carlos Varela, c oordinador de la Asociación Minera Castilla de Oro, de Buriticá, reconoció que en la mayoría de minas de la población la usan. Advirtió que no entiende porqué los llaman ilegales si ellos no están usurpando terrenos de nadie, puesto que la mayoría son dueños de los predios, que figuran como servidumbre minera.
El secretario de Gobierno de Buriticá, Diego Guzmán, informó que se detectaron 64 explotaciones mineras que no están reconocidas y en la mayoría están elaborando la pólvora.