En plena campaña política, a Jorge Hernández Q. la Policía y Rentas le aprehendieron 2.364 medias de ron.
En la turbia corriente del río Medellín, con previo tratamiento en la Planta de Aguas Residuales de San Fernando, terminaron los 886.500 mililitros de ron que Rentas Departamentales y la Policía Fiscal y Aduanera (Polfa) le aprehendieron el 1° de julio de 2011 en su sede política a Jorge Alberto Hernández Quiñónez, quien con 20.901 votos salió electo Diputado de la Asamblea de Antioquia por el Partido de la U.
El abogado y contador público, nacido en el municipio antioqueño de Campamento, fue Secretario de Participación Ciudadana en la Gobernación de Luis Alfredo Ramos Botero. Allí estuvo entre enero de 2008 y diciembre de 2010 y fue un consentido de Andrés Isaza Pérez, gerente de la Fábrica de Licores de Antioquia (FLA), al punto de entregarle como degustación, en tres años, 12.124 botellas de ron y aguardiente.
El primer año, el Secretario pidió, y le dieron, 90 botellas. En 2009 pasó a 480. Y en 2010 subió a 11.554 botellas; de estas últimas, 5.610 eran medias, marcadas como si fueran con destino a otro departamento: "Ron Valle 375".
¿Por qué tanto? El hoy exgerente de la FLA, Andrés Isaza Pérez, dijo que su compañero de gabinete le vendió esta idea: como titular de Participación Ciudadana, Hernández Quiñónez viajaba unos días antes a los municipios en los que el Gobernador de Antioquia realizaba los Cabildos Temáticos; organizaba a los líderes y aprovechaba para llevar, cada vez, de 2 a 4 cajas, para compartir con la gente.
Visto así, suena poco. Sin embargo, las 11.554 unidades del 2010 son más de 31 botellas diarias. ¿Significa eso que hubo aguardiente y ron pa´ todo el mundo en los encuentros de Ramos Botero con la comunidad? (Ver recuadro).
Después de tres años de servicio público, Hernández Quiñónez buscó una curul en la Asamblea Departamental. Los vecinos del barrio Mayorca, cercano al aeropuerto Olaya Herrera, todavía identifican la que fuera su sede, ubicada en la calle 1A N° 65 A 28, como "la casa de los políticos". El tono despectivo lo explica un suceso del 1° de julio de 2011. Ese día, al final de la mañana, un ingeniero químico, dos auxiliares y un conductor de Rentas Departamentales, llegaron acompañados de la Polfa hasta el inmueble. Un informante contó que allí tenían guardadas, por lo menos, 100 cajas de licor. Aunque el número no era exacto, el cooperante se ganó una recompensa, que pidió que le entregaran en una bolsa negra en un bar del centro de Medellín.
No valieron "padrinos"
Como la caleta era grande y se veían venir poderosas influencias políticas, a un empleado de Rentas Departamentales se le oyó decir que, a la mañana siguiente, seguro estarían devolviendo las 79 cajas de ron encontradas en el garaje de la campaña política. Una persona que habló ese mismo día con Hernández Quiñónez confirmó que el político también confiaba en sus "padrinos" y creía que para arreglar el lío bastaría con que la FLA le certificara que las cajas eran producto de una degustación.
Los dos se equivocaron. De nada valieron las presiones que llegaron del piso 12 de la Gobernación para que Hacienda y Rentas "le echaran hielo" al tema, o sea "tapen, tapen". La incautación era significativa. Las 2.364 botellas las tuvieron que acomodar en dos camionetas Chevrolet, con doble cabina y platón, identificadas con las placas SNM 865 de Sabaneta y MOL 093 de Medellín. Pero lo más grave es que el hallazgo lindaba con el Código Penal.
De las 79 cajas, a Rentas le mostraron, como soporte para 29, unos documentos que acreditaban tanto su originalidad, como el hecho de que "habían sido donadas para degustación por parte del Gerente de la FLA al Doctor Jorge Hernández, en el año 2010, quien en esa época se desempeñaba como Secretario de Participación Ciudadana de la Gobernación de Antioquia y actualmente se encuentra en campaña política por el Partido de la U", según reza un informe oficial de Rentas.
Desde la perspectiva de esta misma unidad administrativa -pues otra cosa será lo que allí investiguen autoridades competentes, como la Fiscalía, la Procuraduría y la Contraloría- el ron fue aprehendido porque no se mostró el comprobante de pago del Impuesto al Consumo; porque al estar marcado como destino el Valle del Cauca lo incautado "se convierte en un carrusel" y porque se presentó un soporte para 29 cajas, cuando en realidad eran 79.
Un hecho más captó la atención de Rentas Departamentales. En un operativo que la entidad hizo el 26 de julio de ese mismo 2011, halló en una licorera de Envigado, situada en la transversal 34 Sur N° 39-04, tres medias de ron con la misma marcación del producto que le habían dado al Secretario de Participación Ciudadana (260907-1842M1), que también resultó ser la misma marcación del licor que le hallaron luego como candidato a la Asamblea.
La versión de Andrés Isaza es que ese lote de ron, que fue producido el 26 de septiembre de 2007 (de ahí los números 260907), se sacó para una penetración de mercado en el Departamento del Valle, que al final no se dio. Su gerencia empezó en 2008 y dos años después, para evitar que se desperdiciara, lo repartieron como degustación.
El problema para Rentas Departamentales, que combate los licores de contrabando y adulterados, es que ni ese lote ni los otros productos entregados en prácticamente todo el período 2008-2011 llevaban el distintivo de degustación de la FLA, lo cual los convertía en exquisita joya para quienes viven del mercado ilegal. Por lo menos en cuatro cartas la entidad le llamó la atención a la administración de la FLA sobre el asunto, pero no recibió respuesta.
El caso del hoy Diputado y la licorera de Envigado sirvió para que en Rentas se hicieran preguntas como estas: ¿hubo funcionarios de la FLA o del operador logístico vinculados al contrabando de licores, específicamente a la operación de carrusel, mediante la cual se simula que un producto va para otro departamento, pero termina comercializándose en Antioquia, evadiendo el pago de los altos impuestos al consumo? ¿Hernández Quiñónez, o uno de sus ayudantes, comercializó algunas cajas de ron que le había donado la FLA en 2010? ¿Parte del "Ron Valle 375" fue sacado ilegalmente de la Fábrica de Licores de Antioquia?
"Fue un regalo de la FLA". Así respondió personal de la sede política a la pregunta de Rentas sobre el origen del ron aprehendido. Cotejada esa versión con Andrés Isaza Pérez, este le afirmó a EL COLOMBIANO que tales cajas no eran una degustación para un político en campaña: "yo nunca le di degustaciones a candidatos, eso es prohibido por la ley. En eso sí quiero ser muy claro".
Isaza sostuvo que no hay forma de saber en manos de quién terminaron las botellas de ron que inicialmente se fabricaron pensando en un despacho para el Valle, pero luego se dieron como degustaciones. Igual, añadió, ocurriría con las cajas que van a discotecas y restaurantes, como parte de las actividades de promoción y mercadeo de la FLA. Se sabe, sí, cuánto recibió cada cliente, pero no qué lote específico se le dio a cada quién.
El beneficio de la duda cabe. De un lado, porque Isaza Pérez también entregó "Ron Valle 375", entre otros, a Rafael Escobar Villada (1.180 botellas); la Unidad Residencial Luna Lunera (90 unidades) y hasta a la Contraloría General de Antioquia (30 botellas), según registros de degustaciones entre enero-junio de 2010 consultados por este diario. Y, de otro, porque su teoría no encaja con lo detectado por Rentas en el operativo a la sede política anotada.
A juicio del exgerente de la FLA, lo aprehendido al político en campaña electoral no debería tener nada qué ver con lo que él le entregó al Secretario de Participación Ciudadana. Rentas probó que sí la tiene. Isaza Pérez no comentó del sentimiento que este hecho produjo en el equipo de trabajo del gobernador Ramos Botero, pero sí salvó su propia responsabilidad: "Yo le dije, a mí no me metan en ese rollo, yo no tengo nada que ver. ¿Qué más les iba a decir? Le dije a Jorge: Jorge, usted mucho cuidado, usted tiene qué responder por esas cosas. Yo no tengo idea si usted lo compró, si no lo compró, si lo utilizó o no lo utilizó. Usted es el que responde. A mí no me meta en carajadas en las que no tengo nada que ver".
-¿Y qué le dijo?
"No, que tranquilo, que estuviera fresco"
-¿Fresco porque no lo iba a meter?
"No, no, que él había hecho las cosas bien. Le dije preste atención, hermano, porque a mí no me gustan esos escándalos. Hable con él".
A Isaza Pérez se le comentó de la salida fácil que buscaba Hernández Quiñónez, mediante un certificado de la FLA de que esas 79 cajas de ron las había recibido como degustación, ante lo cual exclamó: "sí, pero yo no le iba a certificar a él nada.
¿De qué?"
-Eso sí sería certificar un ilícito.
"Sí, claro, yo no le iba a certificar nada. Yo lo que tengo es lo que me solicitó y las salidas y todo, como Secretario de Participación Ciudadana. De lo otro, por qué le iba a certificar eso. Le dije, no, papito, no me meta en ningún rollo. Yo no tengo nada que ver con eso".
PREGUNTAS
¿BEBETAS O FORMACIÓN DE LÍDERES?
¿Qué hacía Jorge Hernández Quiñónez con tanto licor?
Un exsecretario de despacho dijo que el Gobernador, Luis Alfredo Ramos, le ordenó a la FLA que entregara esas degustaciones al Secretario de Participación Ciudadana. El exgerente de la empresa, Andrés Isaza Pérez, afirmó que Hernández Quiñónez le vendió, a él, esa idea de dar licor en los encuentros del pueblo con el mandatario. Un exfuncionario del primer nivel de confianza de Ramos señaló que "esos cabildos eran con cero 'guaro', tanto a la entrada como a la salida; escasamente se daban refrescos". Una persona de logística reveló que en los precabildos sí se daba trago y detalles de la FLA. Otra fuente, del piso 12 de la Gobernación, aseguró que en esos eventos "nunca se vio una sola botella. Si todo ese licor lo guardó Jorge Hernández, a quien aprecio mucho, es un error que se diga que se reunía con la gente para hacer agasajos".
¿Qué dicen las cifras?
Para un cabildo en Sopetrán, en 2009, reportan 30 medias (entre ron y aguardiente); para el precabildo y cabildo en Montebello, en 2011, la FLA dio 30 medias. Para un precabildo y cabildo en San Carlos, en 2010, Hernández Quiñónez pidió 300 medias. Y, él mismo, para una reunión con líderes del Suroeste, recibió 180 medias y para la del Nordeste, donde está su tierra, Campamento, le dieron 600.
CLAVES
OFICINAS, BODEGA DE RON Y SEDE POLÍTICA
En la turbia corriente del río Medellín, con previo tratamiento en la Planta de Aguas Residuales de San Fernando, terminaron los 886.500 mililitros de ron que Rentas Departamentales y la Policía Fiscal y Aduanera (Polfa) le aprehendieron el 1° de julio de 2011 en su sede política a Jorge Alberto Hernández Quiñónez, quien con 20.901 votos salió electo Diputado de la Asamblea de Antioquia por el Partido de la U.
El abogado y contador público, nacido en el municipio antioqueño de Campamento, fue Secretario de Participación Ciudadana en la Gobernación de Luis Alfredo Ramos Botero. Allí estuvo entre enero de 2008 y diciembre de 2010 y fue un consentido de Andrés Isaza Pérez, gerente de la Fábrica de Licores de Antioquia (FLA), al punto de entregarle como degustación, en tres años, 12.124 botellas de ron y aguardiente.
El primer año, el Secretario pidió, y le dieron, 90 botellas. En 2009 pasó a 480. Y en 2010 subió a 11.554 botellas; de estas últimas, 5.610 eran medias, marcadas como si fueran con destino a otro departamento: "Ron Valle 375".
¿Por qué tanto? El hoy exgerente de la FLA, Andrés Isaza Pérez, dijo que su compañero de gabinete le vendió esta idea: como titular de Participación Ciudadana, Hernández Quiñónez viajaba unos días antes a los municipios en los que el Gobernador de Antioquia realizaba los Cabildos Temáticos; organizaba a los líderes y aprovechaba para llevar, cada vez, de 2 a 4 cajas, para compartir con la gente.
Visto así, suena poco. Sin embargo, las 11.554 unidades del 2010 son más de 31 botellas diarias. ¿Significa eso que hubo aguardiente y ron pa´ todo el mundo en los encuentros de Ramos Botero con la comunidad? (Ver recuadro).
Después de tres años de servicio público, Hernández Quiñónez buscó una curul en la Asamblea Departamental. Los vecinos del barrio Mayorca, cercano al aeropuerto Olaya Herrera, todavía identifican la que fuera su sede, ubicada en la calle 1A N° 65 A 28, como "la casa de los políticos". El tono despectivo lo explica un suceso del 1° de julio de 2011. Ese día, al final de la mañana, un ingeniero químico, dos auxiliares y un conductor de Rentas Departamentales, llegaron acompañados de la Polfa hasta el inmueble. Un informante contó que allí tenían guardadas, por lo menos, 100 cajas de licor. Aunque el número no era exacto, el cooperante se ganó una recompensa, que pidió que le entregaran en una bolsa negra en un bar del centro de Medellín.
No valieron "padrinos"
Como la caleta era grande y se veían venir poderosas influencias políticas, a un empleado de Rentas Departamentales se le oyó decir que, a la mañana siguiente, seguro estarían devolviendo las 79 cajas de ron encontradas en el garaje de la campaña política. Una persona que habló ese mismo día con Hernández Quiñónez confirmó que el político también confiaba en sus "padrinos" y creía que para arreglar el lío bastaría con que la FLA le certificara que las cajas eran producto de una degustación.
Los dos se equivocaron. De nada valieron las presiones que llegaron del piso 12 de la Gobernación para que Hacienda y Rentas "le echaran hielo" al tema, o sea "tapen, tapen". La incautación era significativa. Las 2.364 botellas las tuvieron que acomodar en dos camionetas Chevrolet, con doble cabina y platón, identificadas con las placas SNM 865 de Sabaneta y MOL 093 de Medellín. Pero lo más grave es que el hallazgo lindaba con el Código Penal.
De las 79 cajas, a Rentas le mostraron, como soporte para 29, unos documentos que acreditaban tanto su originalidad, como el hecho de que "habían sido donadas para degustación por parte del Gerente de la FLA al Doctor Jorge Hernández, en el año 2010, quien en esa época se desempeñaba como Secretario de Participación Ciudadana de la Gobernación de Antioquia y actualmente se encuentra en campaña política por el Partido de la U", según reza un informe oficial de Rentas.
Desde la perspectiva de esta misma unidad administrativa -pues otra cosa será lo que allí investiguen autoridades competentes, como la Fiscalía, la Procuraduría y la Contraloría- el ron fue aprehendido porque no se mostró el comprobante de pago del Impuesto al Consumo; porque al estar marcado como destino el Valle del Cauca lo incautado "se convierte en un carrusel" y porque se presentó un soporte para 29 cajas, cuando en realidad eran 79.
Un hecho más captó la atención de Rentas Departamentales. En un operativo que la entidad hizo el 26 de julio de ese mismo 2011, halló en una licorera de Envigado, situada en la transversal 34 Sur N° 39-04, tres medias de ron con la misma marcación del producto que le habían dado al Secretario de Participación Ciudadana (260907-1842M1), que también resultó ser la misma marcación del licor que le hallaron luego como candidato a la Asamblea.
La versión de Andrés Isaza es que ese lote de ron, que fue producido el 26 de septiembre de 2007 (de ahí los números 260907), se sacó para una penetración de mercado en el Departamento del Valle, que al final no se dio. Su gerencia empezó en 2008 y dos años después, para evitar que se desperdiciara, lo repartieron como degustación.
El problema para Rentas Departamentales, que combate los licores de contrabando y adulterados, es que ni ese lote ni los otros productos entregados en prácticamente todo el período 2008-2011 llevaban el distintivo de degustación de la FLA, lo cual los convertía en exquisita joya para quienes viven del mercado ilegal. Por lo menos en cuatro cartas la entidad le llamó la atención a la administración de la FLA sobre el asunto, pero no recibió respuesta.
El caso del hoy Diputado y la licorera de Envigado sirvió para que en Rentas se hicieran preguntas como estas: ¿hubo funcionarios de la FLA o del operador logístico vinculados al contrabando de licores, específicamente a la operación de carrusel, mediante la cual se simula que un producto va para otro departamento, pero termina comercializándose en Antioquia, evadiendo el pago de los altos impuestos al consumo? ¿Hernández Quiñónez, o uno de sus ayudantes, comercializó algunas cajas de ron que le había donado la FLA en 2010? ¿Parte del "Ron Valle 375" fue sacado ilegalmente de la Fábrica de Licores de Antioquia?
"Fue un regalo de la FLA". Así respondió personal de la sede política a la pregunta de Rentas sobre el origen del ron aprehendido. Cotejada esa versión con Andrés Isaza Pérez, este le afirmó a EL COLOMBIANO que tales cajas no eran una degustación para un político en campaña: "yo nunca le di degustaciones a candidatos, eso es prohibido por la ley. En eso sí quiero ser muy claro".
Isaza sostuvo que no hay forma de saber en manos de quién terminaron las botellas de ron que inicialmente se fabricaron pensando en un despacho para el Valle, pero luego se dieron como degustaciones. Igual, añadió, ocurriría con las cajas que van a discotecas y restaurantes, como parte de las actividades de promoción y mercadeo de la FLA. Se sabe, sí, cuánto recibió cada cliente, pero no qué lote específico se le dio a cada quién.
El beneficio de la duda cabe. De un lado, porque Isaza Pérez también entregó "Ron Valle 375", entre otros, a Rafael Escobar Villada (1.180 botellas); la Unidad Residencial Luna Lunera (90 unidades) y hasta a la Contraloría General de Antioquia (30 botellas), según registros de degustaciones entre enero-junio de 2010 consultados por este diario. Y, de otro, porque su teoría no encaja con lo detectado por Rentas en el operativo a la sede política anotada.
A juicio del exgerente de la FLA, lo aprehendido al político en campaña electoral no debería tener nada qué ver con lo que él le entregó al Secretario de Participación Ciudadana. Rentas probó que sí la tiene. Isaza Pérez no comentó del sentimiento que este hecho produjo en el equipo de trabajo del gobernador Ramos Botero, pero sí salvó su propia responsabilidad: "Yo le dije, a mí no me metan en ese rollo, yo no tengo nada que ver. ¿Qué más les iba a decir? Le dije a Jorge: Jorge, usted mucho cuidado, usted tiene qué responder por esas cosas. Yo no tengo idea si usted lo compró, si no lo compró, si lo utilizó o no lo utilizó. Usted es el que responde. A mí no me meta en carajadas en las que no tengo nada que ver".
-¿Y qué le dijo?
"No, que tranquilo, que estuviera fresco"
-¿Fresco porque no lo iba a meter?
"No, no, que él había hecho las cosas bien. Le dije preste atención, hermano, porque a mí no me gustan esos escándalos. Hable con él".
A Isaza Pérez se le comentó de la salida fácil que buscaba Hernández Quiñónez, mediante un certificado de la FLA de que esas 79 cajas de ron las había recibido como degustación, ante lo cual exclamó: "sí, pero yo no le iba a certificar a él nada.
¿De qué?"
-Eso sí sería certificar un ilícito.
"Sí, claro, yo no le iba a certificar nada. Yo lo que tengo es lo que me solicitó y las salidas y todo, como Secretario de Participación Ciudadana. De lo otro, por qué le iba a certificar eso. Le dije, no, papito, no me meta en ningún rollo. Yo no tengo nada que ver con eso".
PREGUNTAS
¿BEBETAS O FORMACIÓN DE LÍDERES?
¿Qué hacía Jorge Hernández Quiñónez con tanto licor?
Un exsecretario de despacho dijo que el Gobernador, Luis Alfredo Ramos, le ordenó a la FLA que entregara esas degustaciones al Secretario de Participación Ciudadana. El exgerente de la empresa, Andrés Isaza Pérez, afirmó que Hernández Quiñónez le vendió, a él, esa idea de dar licor en los encuentros del pueblo con el mandatario. Un exfuncionario del primer nivel de confianza de Ramos señaló que "esos cabildos eran con cero 'guaro', tanto a la entrada como a la salida; escasamente se daban refrescos". Una persona de logística reveló que en los precabildos sí se daba trago y detalles de la FLA. Otra fuente, del piso 12 de la Gobernación, aseguró que en esos eventos "nunca se vio una sola botella. Si todo ese licor lo guardó Jorge Hernández, a quien aprecio mucho, es un error que se diga que se reunía con la gente para hacer agasajos".
¿Qué dicen las cifras?
Para un cabildo en Sopetrán, en 2009, reportan 30 medias (entre ron y aguardiente); para el precabildo y cabildo en Montebello, en 2011, la FLA dio 30 medias. Para un precabildo y cabildo en San Carlos, en 2010, Hernández Quiñónez pidió 300 medias. Y, él mismo, para una reunión con líderes del Suroeste, recibió 180 medias y para la del Nordeste, donde está su tierra, Campamento, le dieron 600.
CLAVES
OFICINAS, BODEGA DE RON Y SEDE POLÍTICA
1. La sede política del candidato tenía la misma dirección de dos firmas contratistas del Estado: el Instituto Nacional de Administración Pública (Inap Ltda.) y Liderar Ltda.
2. Jorge Alberto Hernández Quiñónez aportó el 40% de los $10 millones con los que se creó Liderar Ltda, el 10 de septiembre de 2003, según reza la Escritura 2.335.
3. El hoy Diputado del Partido de la U. fue representante legal del Inap Ltda., según consta en registro de proveedores de la Contraloría General de Antioquia (CGA).
4. De $25 millones aportados por particulares a su campaña, $10 millones los puso Nelson Marino Flórez Hincapié, socio en 1998 del nuevo Inap Ltda. dice Escritura 4.742.
5. Miguel Ángel Torres Cuervo, el contador de la campaña de Hernández Quiñónez, también figura como contador del Inap Ltda. en procesos de contratación estatal.
6. El Inap Ltda. y Liderar Ltda. han participado juntos en licitaciones públicas, como puede apreciarse en un documento de la regional de la Aerocivil, de mayo 23 de 2011.
7. En su reporte al Consejo Nacional Electoral (CNE) el electo Diputado de Antioquia declaró cero pesos por concepto de "gastos de oficina y adquisiciones".
8. En suma, la casa de la Calle 1A N° 65 A 28, en la que Rentas y la Policía Fiscal hicieron el operativo, no era una vivienda. Era una sede política, bodega de ron y oficina.