Gestionar el documento es negocio en Bello, Itagüí, Envigado y Medellín. Solo los tramitadores aciertan para acceder a citas.
No hay cupo. Tres palabras reproduce sin variación la pantalla del computador a lo largo del horario de atención de la Registraduría en Envigado en el proceso para solicitar cita para el trámite de la cédula.
El mensaje, sobre fondo rojo, se repite 15 veces de 8:00 a.m. a 3:00 p.m. Silencio y fin de la gestión hasta el siguiente día hábil.
En la sede de la entidad hay pocas sillas ocupadas a pesar de que ya han sido asignadas las 120 citas que en promedio destinan a diario para tramitar el documento, toda vez que este ha sido extraviado o robado.
La instrucción es una sola de parte de la voz atrás del rótulo "información -entrega de cédulas": las citas solo se asignan por internet.
"Es que no hay que intentar un solo día, tiene que ser muchos días, seguido hasta que tenga la cita", sentencia la funcionaria.
Intentar entre la medianoche y la 1:00 a.m., hora en que se abre la agenda, es otra recomendación, de parte de los servidores ante la insistencia de algún usuario. Ir a un punto Vive Digital para encontrar ayuda sirve también de paliativo ante la situación.
"Uno se inscribe y ahí (en la Registraduría) le dicen que a partir de las 12:00 de la noche se meta, abra la página y empiece a buscar", revela un usuario. Despúes de intentar por tres noches seguidas, ha caído en manos de los tramitadores.
"Vea, no pierda el tiempo", dice una de las personas que esperan. "Vaya al frente, en un local de fotografías y ahí le dan la cita".
En efecto, cruzando la calle, en un segundo piso, en un negocio particular, hay citas. Por 10.000 pesos ofrecen los cupos que antes aparecían en rojo, agotados, en la pantalla.
¿Dónde está el secreto?
Un funcionario de uno de los puntos Vive Digital, del ministerio de las TIC en el Valle de Aburrá señala que la ayuda que puede ofrecer es el acceso a internet y explicar el proceso a quien necesita la cita.
"Tal como puede hacer la persona en su casa si tiene computador e internet y si sabe usarlo".
En el sitio hay capacitaciones gratis en áreas básicas de informática, pero no un secreto para lograr las citas, el que sí parecen tener los tramitadores.
"Es lo mismo en Bello, Itagüí, Envigado o Medellín. En todas partes hay tramitadores que acaparan las citas" ¿Cómo hacen? "No sé", revela.
El registrador Delegado para Antioquia, Adolfo Fernández, niega que sea difícil acceder a citas a través del sistema que las otorga para las sedes en Bello, Envigado, Itagüí y Medellín.
Considera que la existencia de tramitadores "es un problema de autocontrol del ciudadano. No son personas que trabajen con la entidad, no se debe pagar para conseguir cita".
Si fuera posible.
En cuanto a los controles, señala los letreros que dicen que no se permite la presencia de tramitadores.
"Por el contrario, son medios para facilitar los trámites a la ciudadanía", reitera.
No hay cupo. Tres palabras reproduce sin variación la pantalla del computador a lo largo del horario de atención de la Registraduría en Envigado en el proceso para solicitar cita para el trámite de la cédula.
El mensaje, sobre fondo rojo, se repite 15 veces de 8:00 a.m. a 3:00 p.m. Silencio y fin de la gestión hasta el siguiente día hábil.
En la sede de la entidad hay pocas sillas ocupadas a pesar de que ya han sido asignadas las 120 citas que en promedio destinan a diario para tramitar el documento, toda vez que este ha sido extraviado o robado.
La instrucción es una sola de parte de la voz atrás del rótulo "información -entrega de cédulas": las citas solo se asignan por internet.
"Es que no hay que intentar un solo día, tiene que ser muchos días, seguido hasta que tenga la cita", sentencia la funcionaria.
Intentar entre la medianoche y la 1:00 a.m., hora en que se abre la agenda, es otra recomendación, de parte de los servidores ante la insistencia de algún usuario. Ir a un punto Vive Digital para encontrar ayuda sirve también de paliativo ante la situación.
"Uno se inscribe y ahí (en la Registraduría) le dicen que a partir de las 12:00 de la noche se meta, abra la página y empiece a buscar", revela un usuario. Despúes de intentar por tres noches seguidas, ha caído en manos de los tramitadores.
"Vea, no pierda el tiempo", dice una de las personas que esperan. "Vaya al frente, en un local de fotografías y ahí le dan la cita".
En efecto, cruzando la calle, en un segundo piso, en un negocio particular, hay citas. Por 10.000 pesos ofrecen los cupos que antes aparecían en rojo, agotados, en la pantalla.
¿Dónde está el secreto?
Un funcionario de uno de los puntos Vive Digital, del ministerio de las TIC en el Valle de Aburrá señala que la ayuda que puede ofrecer es el acceso a internet y explicar el proceso a quien necesita la cita.
"Tal como puede hacer la persona en su casa si tiene computador e internet y si sabe usarlo".
En el sitio hay capacitaciones gratis en áreas básicas de informática, pero no un secreto para lograr las citas, el que sí parecen tener los tramitadores.
"Es lo mismo en Bello, Itagüí, Envigado o Medellín. En todas partes hay tramitadores que acaparan las citas" ¿Cómo hacen? "No sé", revela.
El registrador Delegado para Antioquia, Adolfo Fernández, niega que sea difícil acceder a citas a través del sistema que las otorga para las sedes en Bello, Envigado, Itagüí y Medellín.
Considera que la existencia de tramitadores "es un problema de autocontrol del ciudadano. No son personas que trabajen con la entidad, no se debe pagar para conseguir cita".
Si fuera posible.
En cuanto a los controles, señala los letreros que dicen que no se permite la presencia de tramitadores.
"Por el contrario, son medios para facilitar los trámites a la ciudadanía", reitera.