A pesar del paro judicial, el proceso a Alejandra Salazar por la muerte de la niña Válery Pérez continuó sin contratiempo.
La acusada rechazó ayer su culpabilidad por homicidio agravado, en relación con la caída de la menor de seis años desde el piso 18 de un edificio de El Poblado. La juez primera Penal del Circuito fijó para el 8 de noviembre el comienzo del juicio oral. La diligencia, en la que las partes implicadas solicitaron la práctica de un total de 71 pruebas testimoniales y los conceptos de cuatro peritos, se prolongó por casi cuatro horas, superando algunas dificultades de la parálisis parcial de las labores.
Dentro del proceso, la juez determinó además que se destinarán los días 20, 21 y 22 de noviembre para escuchar todos los testimonios con los cuales la justicia decidirá si la entonces compañera sentimental de Alejandro Pérez, papá de la niña, empujó a la menor al vacío desde el balcón del apartamento de este, como presume la Fiscalía.
El ente acusador solicitó declaraciones de 60 personas que aportarán su expericia sobre los hechos ocurridos entre el pasado 5 de julio, cuando cayó la niña y el 11 del mismo mes, cuando se produjo su muerte. Los padres de Válery solicitaron la presencia de otros cuatro testigos. La defensa de la procesada, manifestó interés en llamar a declarar a siete personas.
En la etapa procesal serán escuchados los primeros auxiliadores de la niña, miembros del equipo médico que la trató en la clínica El Rosario, sus profesoras, testigos del hecho, además de un excompañero sentimental de Alejandra Salazar , considerado importante para establecer aspectos de la relación que sostenía con Alejandro Pérez , con Válery y con la expareja de este, Yehimy Torres, mamá de la niña.
El abogado defensor Ariel Martínez, destacó que la audiencia fue "pacífica" y que las partes interesadas acordaron hechos que se dan por probados, que harán menos extensa la siguiente etapa procesal.
Explicó que si su cliente fuera condenada por homicidio culposo y no por homicidio agravado, la pena podría estar entre cinco y diez años de prisión y no de 40 años, como en el caso de una condena por la tesis que defiende la Fiscalía.
"Dios y Válery nos tienen acá y por ella es que estamos haciendo esto", sostuvo Yehimy Torres, mamá de la niña, quien seguirá viajando desde Bogotá para estar al tanto del juicio.
La acusada rechazó ayer su culpabilidad por homicidio agravado, en relación con la caída de la menor de seis años desde el piso 18 de un edificio de El Poblado. La juez primera Penal del Circuito fijó para el 8 de noviembre el comienzo del juicio oral. La diligencia, en la que las partes implicadas solicitaron la práctica de un total de 71 pruebas testimoniales y los conceptos de cuatro peritos, se prolongó por casi cuatro horas, superando algunas dificultades de la parálisis parcial de las labores.
Dentro del proceso, la juez determinó además que se destinarán los días 20, 21 y 22 de noviembre para escuchar todos los testimonios con los cuales la justicia decidirá si la entonces compañera sentimental de Alejandro Pérez, papá de la niña, empujó a la menor al vacío desde el balcón del apartamento de este, como presume la Fiscalía.
El ente acusador solicitó declaraciones de 60 personas que aportarán su expericia sobre los hechos ocurridos entre el pasado 5 de julio, cuando cayó la niña y el 11 del mismo mes, cuando se produjo su muerte. Los padres de Válery solicitaron la presencia de otros cuatro testigos. La defensa de la procesada, manifestó interés en llamar a declarar a siete personas.
En la etapa procesal serán escuchados los primeros auxiliadores de la niña, miembros del equipo médico que la trató en la clínica El Rosario, sus profesoras, testigos del hecho, además de un excompañero sentimental de Alejandra Salazar , considerado importante para establecer aspectos de la relación que sostenía con Alejandro Pérez , con Válery y con la expareja de este, Yehimy Torres, mamá de la niña.
El abogado defensor Ariel Martínez, destacó que la audiencia fue "pacífica" y que las partes interesadas acordaron hechos que se dan por probados, que harán menos extensa la siguiente etapa procesal.
Explicó que si su cliente fuera condenada por homicidio culposo y no por homicidio agravado, la pena podría estar entre cinco y diez años de prisión y no de 40 años, como en el caso de una condena por la tesis que defiende la Fiscalía.
"Dios y Válery nos tienen acá y por ella es que estamos haciendo esto", sostuvo Yehimy Torres, mamá de la niña, quien seguirá viajando desde Bogotá para estar al tanto del juicio.