El Juzgado 30 Administrativo de Oralidad de Medellín se abstuvo de sancionar al alcalde, Aníbal Gaviria, por un incidente de desacato interpuesto por habitantes de la 33, favorecidos con una acción popular que exige controlar el ruido y ocupación del espacio público en ese sector de la ciudad.
Según la decisión judicial, el Municipio cumplió con la sentencia, proferida el 21 de junio de 2012. No obstante esta determinación, el juzgado instó al Municipio para que adelante un programa de incentivos a los establecimientos para que insonoricen sus locales.
Aunque el fallo fue favorable, la Alcaldía dijo que seguirá implementando medidas de control y continuará adelantando otras estrategias pedagógicas como la conformación de las brigadas contra el ruido.
Teresa Bernal, habitante del sector, anotó que la acción popular del Juzgado 30 solo pide autocontrol a los negociantes, el que muchos no han cumplido y por eso interpusieron otra acción popular ante el Tribunal Administrativo de Antioquia, para que se les proteja el derecho a la intimidad y el medio ambiente sano en un sector más amplio y que incluya barrios vecinos como Laureles, porque este fallo solo abarca de Bulerías hasta la 80.
Jaime Jaramillo, habitante de la 33, denunció que el ruido se ha incrementado.
Según la decisión judicial, el Municipio cumplió con la sentencia, proferida el 21 de junio de 2012. No obstante esta determinación, el juzgado instó al Municipio para que adelante un programa de incentivos a los establecimientos para que insonoricen sus locales.
Aunque el fallo fue favorable, la Alcaldía dijo que seguirá implementando medidas de control y continuará adelantando otras estrategias pedagógicas como la conformación de las brigadas contra el ruido.
Teresa Bernal, habitante del sector, anotó que la acción popular del Juzgado 30 solo pide autocontrol a los negociantes, el que muchos no han cumplido y por eso interpusieron otra acción popular ante el Tribunal Administrativo de Antioquia, para que se les proteja el derecho a la intimidad y el medio ambiente sano en un sector más amplio y que incluya barrios vecinos como Laureles, porque este fallo solo abarca de Bulerías hasta la 80.
Jaime Jaramillo, habitante de la 33, denunció que el ruido se ha incrementado.