Los conductores de aproximadamente 30 vehículos de las rutas 262 y 265 de Castilla decidieron suspender sus actividades este martes por lo que definieron como un abuso laborar por parte de la empresa Transportes Medellín Castilla.
Según los transportadores, la empresa implementó un control que consiste en hacer conteos de los pasajeros que se movilizan en los buses hasta tres veces al día. Aunque los conductores sostienen que no se oponen a las regulaciones, insisten que la empresa debe considerar las condiciones de seguridad y las presiones de los grupos armados que operan en esa zona de la ciudad.
"Aquí hay ocho combos que nunca pagan, se le arriman a uno, le dicen que lo lleve y uno no les puede cobrar. ¿Qué tiene que hacer?, quedarse callado", dice uno de los conductores que pidió no revelar su nombre.
Según afirman los transportadores, cada vez que el conteo de pasajeros no coincide con el número registrado, la empresa impone una sanción económica de 30 mil pesos. Si se presentan tres conteos en el día con inconsistencias un conductor pagaría 90 mil pesos en multas.
"Los que pedimos es que dejen esa persecusión porque uno no se alcanza a ganar esa esa platica que le sacan en cada viaje", dijo el mismo transportador que además aseguró que semanalmente cada conductor debe cancelar cerca de 120 mil pesos en vacunas a los combos.
Según los conductores los vehículos continuarán estacionados hasta que no se logre un acuerdo con la empresa.