En las afueras del Hospital Mental de Bello, donde estuvo recluido las últimas dos semanas, fue capturado un hombre sospechoso de asesinar a su propia madre.
El arresto lo ejecutaron investigadores de la Unidad de Vida del CTI de la Fiscalía, a las 2:00 p.m. de este miércoles, y el afectado es el vigilante Joaquín Emilio Goez González, de 24 años.
De acuerdo con el expediente, el pasado 20 de agosto fue asesinada María Rosalba González Hernández, en su vivienda del barrio Santa Cruz de Medellín.
La señora, de 59 años, estaba en la cama cuando se presentó el ataque. El agresor empleó una navaja para causarle tres heridas letales en el lado izquierdo del pecho.
Desde aquel día, su hijo Joaquín Emilio estaba internado en el Hospital Mental y era el principal indiciado de los hechos.
Y este miércoles, apenas los siquiatras le dieron de alta, el CTI oficializó la captura por la supuesta comisión de homicidio agravado.
El vigilante pasó la noche en un calabozo del búnker de la Físcalía, a la espera de la audiencia de control de garantías ante el juzgado.
Fuentes cercanas al caso comentaron que uno de los móviles que se estudia es un presunto intento de exorcismo forzado, que derivó en la muerte de la mujer.
El arresto lo ejecutaron investigadores de la Unidad de Vida del CTI de la Fiscalía, a las 2:00 p.m. de este miércoles, y el afectado es el vigilante Joaquín Emilio Goez González, de 24 años.
De acuerdo con el expediente, el pasado 20 de agosto fue asesinada María Rosalba González Hernández, en su vivienda del barrio Santa Cruz de Medellín.
La señora, de 59 años, estaba en la cama cuando se presentó el ataque. El agresor empleó una navaja para causarle tres heridas letales en el lado izquierdo del pecho.
Desde aquel día, su hijo Joaquín Emilio estaba internado en el Hospital Mental y era el principal indiciado de los hechos.
Y este miércoles, apenas los siquiatras le dieron de alta, el CTI oficializó la captura por la supuesta comisión de homicidio agravado.
El vigilante pasó la noche en un calabozo del búnker de la Físcalía, a la espera de la audiencia de control de garantías ante el juzgado.
Fuentes cercanas al caso comentaron que uno de los móviles que se estudia es un presunto intento de exorcismo forzado, que derivó en la muerte de la mujer.