A solo unos 300 metros de distancia de uno de los sitios turísticos más visitados de la ciudad, la Plaza de Botero, se visualiza una de las problemáticas sociales más crudas y que quedó al desnudo con la intervención hace 10 días a una olla de vicio ubicada en el barrio Estación Villa.
Cerca de 200 consumidores de droga, que fueron sacados de esta cueva, se tomaron cerca de tres cuadras de la avenida De Greiff, entre la Placita de Zea y la Minorista y ya a la vista de todo el mundo consumen vicio en las aceras.
Además, vienen afectando el comercio del sector, pues dicen están ahuyentando la clientela, por el temor que infunden.
Al respecto el vice-alcalde de Gobernabilidad, Luis Fernando Suárez, explicó que el actual sistema de atención a habitante de calle, por su carácter voluntario, es un modelo que no tiene el impacto deseado sobre esta población.
Por eso se trabaja en una estrategia llamada Centro de Protección a la Vida, dentro de la cual se está afinando la expedición de un decreto que permitirá trasladarlos a estos sitios para su resocialización.
"Con la intervención a las ollas de vicio se nos destapa otro problema, pero tenemos que seguir haciéndolo", expresó Suárez.
Agregó que ya se han mirado algunos sitios como posibles sedes de estos centros.