El saliente director de Teleantioquia Noticias Juan Pablo Barrientos Hoyos dijo que empezó a sentirse perseguido por el diputado de la Asamblea Adolfo León Palacio desde que se denunció el caso del también miembro de la Duma Rodrigo Mesa y que renunció debido a estas y otras presiones.
"Una vez se dieron a conocer las declaraciones de Mesa en contra del departamento de Chocó y el posterior escándalo que se armó contra él, el diputado Palacio empezó a hacerme seguimiento y me puso en el centro del debate de la Asamblea, por eso me estaba buscando la caída y lo logró cuando lancé varias opiniones en contra de algunos corporados y de la secretaria de Minas", dijo.
Reconoció que el 19 de junio, luego de una serie de reclamos que le hicieron algunos miembros de la Asamblea y de la Secretaría de Minas por la forma como se cubrió el debate en su contra, llegó "echando chispas" al consejo de redacción y no duda que utilizó algunas palabras groseras.
"Ese momento, indicó, fue aprovechado por alguien para grabar lo que estaba diciendo y luego el diputado Adolfo León Palacio y el exdiputado Julián Bedoya se lo dieron a conocer a la gerente de Teleantioquia, quien calificó de muy grave lo que dijo, por lo que presentó su renuncia.
"Estoy en Nueva York en vacaciones y no me arrepiento de nada, pero lo que sí denuncio es la violación a la libertad de prensa", concluyó el periodista.
Ignacio Gómez, presidente de la Fundación para la Libertad de Prensa opinó que es una situación suigéneris. Conceptuó que es la primera vez que un reportero, todavía anónimo, viola la libertad de expresión grabando a un colega. "Aquí hay un ataque contra la libertad de prensa por algunos miembros de una Asamblea de Antioquia y un reportero que hace las veces de victimario".
El Colombiano trató de hablar con el diputado Palacio y el exdiputado Bedoya, pero no fue posible. Se dejó constancia en sus buzones del celular y también se llamó a la Asamblea.
"Una vez se dieron a conocer las declaraciones de Mesa en contra del departamento de Chocó y el posterior escándalo que se armó contra él, el diputado Palacio empezó a hacerme seguimiento y me puso en el centro del debate de la Asamblea, por eso me estaba buscando la caída y lo logró cuando lancé varias opiniones en contra de algunos corporados y de la secretaria de Minas", dijo.
Reconoció que el 19 de junio, luego de una serie de reclamos que le hicieron algunos miembros de la Asamblea y de la Secretaría de Minas por la forma como se cubrió el debate en su contra, llegó "echando chispas" al consejo de redacción y no duda que utilizó algunas palabras groseras.
"Ese momento, indicó, fue aprovechado por alguien para grabar lo que estaba diciendo y luego el diputado Adolfo León Palacio y el exdiputado Julián Bedoya se lo dieron a conocer a la gerente de Teleantioquia, quien calificó de muy grave lo que dijo, por lo que presentó su renuncia.
"Estoy en Nueva York en vacaciones y no me arrepiento de nada, pero lo que sí denuncio es la violación a la libertad de prensa", concluyó el periodista.
Ignacio Gómez, presidente de la Fundación para la Libertad de Prensa opinó que es una situación suigéneris. Conceptuó que es la primera vez que un reportero, todavía anónimo, viola la libertad de expresión grabando a un colega. "Aquí hay un ataque contra la libertad de prensa por algunos miembros de una Asamblea de Antioquia y un reportero que hace las veces de victimario".
El Colombiano trató de hablar con el diputado Palacio y el exdiputado Bedoya, pero no fue posible. Se dejó constancia en sus buzones del celular y también se llamó a la Asamblea.