Las obras inician el segundo trimestre de 2014. En la Procuraduría cursa una denuncia por licitación de estudios.
En poder de la Secretaría de Infraestructura de Antioquia ya están los resultados de los estudios complementarios exigidos por la Agencia Nacional de Licencias Ambientales para el Túnel de Oriente.
Según el secretario, Mauricio Valencia, luego de someterlos a revisión le entregarán los documentos a la Corporación Autónoma Regional de las cuencas de los ríos Negro y Nare (Cornare), hacia mediados de julio.
Valencia precisa que este es solo uno de los capítulos en que trabaja la Gobernación para darle fundamento al proyecto. "Queremos que la gente entienda que si no ve obras, no es porque el túnel no se vaya a ejecutar, sino para darles tranquilidad a comunidades y colectivos ambientales en el sentido de que el proyecto se ejecuta bajo unas premisas responsables".
Un indicador de que los resultados de los estudios no ponen en riesgo la ejecución del proyecto es que ya se tiene una fecha prevista para el inicio de obras (segundo trimestre de 2014) y que se solicitará la licencia ambiental del túnel paralelo para cumplir con las normas internacionales de seguridad.
Valencia explica que ahora se está invirtiendo el orden de las prioridades, en la que los estudios ambientales toman mucha fuerza pues, "ningún proyecto en Colombia había desarrollado un nivel de estudios de esta naturaleza". En síntesis es un análisis de carácter hidrogeológico con el nivel de ensayos, sondeos, apiques y perforaciones para dar tranquilidad sobre los temas de abatimiento de aguas subterráneas que puedan afectar las cuencas de la parte alta del llano de Santa Elena.
Esto en parte podría responder a una inquietud que a su vez surge del dicho popular expresado recientemente por el diputado de Antioquia, Edinson Muñoz Ciro, "lo que mal empieza mal acaba", que espera no se cumpla con el proyecto Túnel de Oriente. El corporado del Partido Verde afirma que el proceso del túnel comenzó en 1997 y, desde entonces, lleva 31 modificaciones y toda suerte de inconvenientes por no desarrollarse de acuerdo con las normas.
Esto originó que grupos ambientalistas demandaran ante el Tribunal Administrativo de Antioquia la licencia ambiental que otorgó Cornare, por lo que en 2003 fue derogada la resolución argumentando que la Concesión no presentó un diagnóstico ambiental de alternativas para justificar el proyecto. Las empresas interesadas en el proyecto apelaron ante el Consejo de Estado, que el 5 de mayo de 2009 anuló la decisión del Tribunal por no notificársele a la Concesión que había una demanda contra la licencia ambiental.
Lo último fue la suspensión de obras a principios de 2012 por parte de la Anla, porque hacían falta estudios complementarios.
María Teresa Restrepo, vocera de la Veeduría, dice que esperan, como tercer interviniente, conocer los resultados antes de que se hagan públicos y advierte que independiente de lo positivo que resulten queda pendiente el pronunciamiento de la Procuraduría frente a denuncia disciplinaria interpuesta por la ilegalidad de la licitación de los estudios. "Debió ser pública y no privada como se hizo", dijo.
PARA SABER MÁS
VALORIZACIÓN, NO SOLO POR EL TÚNEL
El diputado Juan Esteban Villegas, señaló que inicialmente el aporte al proyecto por valorización no iba a ser de más de 90.000 millones de pesos y este está ya en 120.000 millones. Para el secretario de Infraestructura, Mauricio Valencia, este valor no es definitivo hasta tener el estudio de factibilidad el cual se sustenta en el alcance del proyecto, que no es solo el túnel sino la construcción de vías que hicieron parte de la concesión inicial: Llanogrande-El Canadá, Carmen de Viboral- El Santuario y la que pasa por detrás del aeropuerto, que se considerarán en el derrame de valorización.
EN DEFINITIVALo que se puede deducir es que no hay ningún elemento que ponga en riesgo la ejecución del poyecto y que por el contrario lo que se está haciendo es asegurarla.
En poder de la Secretaría de Infraestructura de Antioquia ya están los resultados de los estudios complementarios exigidos por la Agencia Nacional de Licencias Ambientales para el Túnel de Oriente.
Según el secretario, Mauricio Valencia, luego de someterlos a revisión le entregarán los documentos a la Corporación Autónoma Regional de las cuencas de los ríos Negro y Nare (Cornare), hacia mediados de julio.
Valencia precisa que este es solo uno de los capítulos en que trabaja la Gobernación para darle fundamento al proyecto. "Queremos que la gente entienda que si no ve obras, no es porque el túnel no se vaya a ejecutar, sino para darles tranquilidad a comunidades y colectivos ambientales en el sentido de que el proyecto se ejecuta bajo unas premisas responsables".
Un indicador de que los resultados de los estudios no ponen en riesgo la ejecución del proyecto es que ya se tiene una fecha prevista para el inicio de obras (segundo trimestre de 2014) y que se solicitará la licencia ambiental del túnel paralelo para cumplir con las normas internacionales de seguridad.
Valencia explica que ahora se está invirtiendo el orden de las prioridades, en la que los estudios ambientales toman mucha fuerza pues, "ningún proyecto en Colombia había desarrollado un nivel de estudios de esta naturaleza". En síntesis es un análisis de carácter hidrogeológico con el nivel de ensayos, sondeos, apiques y perforaciones para dar tranquilidad sobre los temas de abatimiento de aguas subterráneas que puedan afectar las cuencas de la parte alta del llano de Santa Elena.
Esto en parte podría responder a una inquietud que a su vez surge del dicho popular expresado recientemente por el diputado de Antioquia, Edinson Muñoz Ciro, "lo que mal empieza mal acaba", que espera no se cumpla con el proyecto Túnel de Oriente. El corporado del Partido Verde afirma que el proceso del túnel comenzó en 1997 y, desde entonces, lleva 31 modificaciones y toda suerte de inconvenientes por no desarrollarse de acuerdo con las normas.
Esto originó que grupos ambientalistas demandaran ante el Tribunal Administrativo de Antioquia la licencia ambiental que otorgó Cornare, por lo que en 2003 fue derogada la resolución argumentando que la Concesión no presentó un diagnóstico ambiental de alternativas para justificar el proyecto. Las empresas interesadas en el proyecto apelaron ante el Consejo de Estado, que el 5 de mayo de 2009 anuló la decisión del Tribunal por no notificársele a la Concesión que había una demanda contra la licencia ambiental.
Lo último fue la suspensión de obras a principios de 2012 por parte de la Anla, porque hacían falta estudios complementarios.
María Teresa Restrepo, vocera de la Veeduría, dice que esperan, como tercer interviniente, conocer los resultados antes de que se hagan públicos y advierte que independiente de lo positivo que resulten queda pendiente el pronunciamiento de la Procuraduría frente a denuncia disciplinaria interpuesta por la ilegalidad de la licitación de los estudios. "Debió ser pública y no privada como se hizo", dijo.
PARA SABER MÁS
VALORIZACIÓN, NO SOLO POR EL TÚNEL
El diputado Juan Esteban Villegas, señaló que inicialmente el aporte al proyecto por valorización no iba a ser de más de 90.000 millones de pesos y este está ya en 120.000 millones. Para el secretario de Infraestructura, Mauricio Valencia, este valor no es definitivo hasta tener el estudio de factibilidad el cual se sustenta en el alcance del proyecto, que no es solo el túnel sino la construcción de vías que hicieron parte de la concesión inicial: Llanogrande-El Canadá, Carmen de Viboral- El Santuario y la que pasa por detrás del aeropuerto, que se considerarán en el derrame de valorización.
EN DEFINITIVALo que se puede deducir es que no hay ningún elemento que ponga en riesgo la ejecución del poyecto y que por el contrario lo que se está haciendo es asegurarla.