Luego del compromiso clásico entre Deportivo Independiente Medellín y Nacional por la Copa Postobón y que dejó como ganador a la escuadra roja 2 goles por cero, la Policía debió controlar pedreas protagonizadas por vándalos en el occidente y centro de la capital antioqueña.
Los enfrentamientos entre seguidores rojos y verdes y de estos contra la Policía -que trataba de evitarlos-, se presentaron en la calle 50 (Colombia), la calle 51 -que fue cerrada para el tránsito de vehículos por unos 20 minutos-, La Iguaná, Carlos E. Restrepo, en el Centro en la calle San Juan frente a La Alpujarra, en la avenida del Ferrocarril, la calle Ayacucho y en los alrededores de la Placita de Flórez.
De este último sector fue llevada a un centro asistencial una menor de once años, que vestía una camiseta roja y quien fue acuchillada en uno de sus glúteos y piernas por delincuentes que vestían prendas del equipo Atlético Nacional.
Al Hospital General ingresó un joven con camiseta de Nacional, quien presentaba un golpe con arma contundente en la cabeza y en Policlínica se concentraron algunos vándalos que fueron contenidos por la Fuerza Pública, luego de que ingresaron dos jóvenes, vestidos también con uniformes del Nacional, heridos con arma blanca.
Ante estos desmanes, la Policía debió a acudir a un refuerzo que previamente había llegado del Escuadrón Antidisturbios de Pereira.
El comandante operativo de la Policía Metropolitana, coronel José David Garzón, dijo que las requisas que hicieron en los alrededores del estadio antes y después del compromiso lograron el decomiso de 37 armas blancas.
Los enfrentamientos entre seguidores rojos y verdes y de estos contra la Policía -que trataba de evitarlos-, se presentaron en la calle 50 (Colombia), la calle 51 -que fue cerrada para el tránsito de vehículos por unos 20 minutos-, La Iguaná, Carlos E. Restrepo, en el Centro en la calle San Juan frente a La Alpujarra, en la avenida del Ferrocarril, la calle Ayacucho y en los alrededores de la Placita de Flórez.
De este último sector fue llevada a un centro asistencial una menor de once años, que vestía una camiseta roja y quien fue acuchillada en uno de sus glúteos y piernas por delincuentes que vestían prendas del equipo Atlético Nacional.
Al Hospital General ingresó un joven con camiseta de Nacional, quien presentaba un golpe con arma contundente en la cabeza y en Policlínica se concentraron algunos vándalos que fueron contenidos por la Fuerza Pública, luego de que ingresaron dos jóvenes, vestidos también con uniformes del Nacional, heridos con arma blanca.
Ante estos desmanes, la Policía debió a acudir a un refuerzo que previamente había llegado del Escuadrón Antidisturbios de Pereira.
El comandante operativo de la Policía Metropolitana, coronel José David Garzón, dijo que las requisas que hicieron en los alrededores del estadio antes y después del compromiso lograron el decomiso de 37 armas blancas.