RIA continúa el proceso de recuperación de tierras destruidas por la minería en el Bajo Cauca. Segunda fase es de 600 ha.
En un área de 100 hectáreas comenzó la siembra de especies maderables del proyecto piloto para la recuperación de tierras degradadas por la minería en el Bajo Cauca antioqueño.
Cuturú, corregimiento de Caucasia, es el epicentro del proyecto en el que participan como cofinanciadores las secretarías de Minas y Agricultura de la Gobernación, las organizaciones de mineros y RIA como operador durante 30 años.
Sergio Restrepo Trujillo, gerente de RIA, destacó que en esta nueva fase, las tierras degradadas ya se encuentran perfiladas, trazadas y olladas, que es el aporte de los mineros, como innovación del proyecto que los convierte en socios.
Tras ello, un grupo de 24 mujeres cabeza de familia (19 viudas) inició la siembra con Acacia Magnium, mezclada con un 10 por ciento de especies nativas. "Se aprovecha el invierno para dedicar todo el mes de mayo y parte de junio a sembrar", comentó Restrepo.
La primera fase demanda una inversión de 613 millones de pesos, y el acto formal tuvo la presencia de voceros de la Usaid que anunciaron la participación del gobierno norteamericano en la siguiente fase.
Lo que viene comprende otras 600 hectáreas, con un costo de 3.600 millones de pesos, con aportes del operador norteamericano Bioredd por 1.000 millones, la Secretaría de Minas por 1.400 millones y los 1.200 millones restantes por los mineros.
Según Fredy Álvarez, presidente de la junta de acción comunal de Cuturú, lo hecho hasta ahora es positivo y tiene motivados a los habitantes del corregimiento. "Se ha puesto mucho interés y se cumple el acuerdo de que la gente que se contrate sea de aquí", afirmó.
La expectativa del líder comunitario con lo que resultará del proyecto maderable es buena porque -anotó- ya se hizo un muestro y con la asesoría técnica de la Reforestadora Integral de Antioquia la expectativa es mejor.
Fredy Álvarez sueña con que "en unos años se volverá a ver vegetación" en lo que ahora parece un desierto, alrededor de Cuturú.
Una experiencia positiva con tierras degradadas recuperadas con Acacia Magnium se puede apreciar en Tarazá.
ANTECEDENTES
MUY GOLPEADO POR LA MINERÍA
Cuturú es uno de los poblados del Bajo Cauca, cuyas tierras están más acabadas por la minería sin control.
Tiene 4.000 habitantes, en su mayoría dedicados a la actividad.
Hace 40 años, este poblado tuvo una de las minas de oro más prósperas de toda la región.