Dos jóvenes desaparecidos en la tarde del Viernes Santo del barrio Campo Valdés, fueron las dos personas halladas desmembradas y en costales a orillas del río Medellín en el barrio Palermo, parte baja de Aranjuez.
El secretario de Seguridad de Medellín Arnulfo Serna, informó que las víctimas fueron Santiago Andrés Tangarife Arrubla, de 19 años, y un menor, de 17 años de edad.
Familiares de las víctimas indicaron que, según las primeras versiones que conocieron de testigos del hecho, los jóvenes fueron subidos a un vehículo del que no les dieron las características, cuando se encontraban en la calle 82 con la calle 50D.
"Es un caso extraño, sobre todo por la forma como fueron muertos porque ni siquiera les han encontrado las cabezas, ya que nunca manifestaron que tuvieran amenazas de muerte", dijo un allegado que pidió la reserva de su nombre.
Anotaron que fueron reconocidos el domingo en la morgue de Medicina Legal por un primo del menor quien llegó hasta allí a averiguar por ellos.
Neonato muerto
De otra parte, en la carrera 77 con calle 31, a un costado del parque del barrio Belén, un reciclador encontró, en una bolsa, a un neonato muerto de sexo femenino. Según las autoridades que diligenciaron el levantamiento del cadáver, se trataba de una niña que ya tenía nueve meses de gestación.
Por este hecho la Policía inició las pesquisas para judicializar a dos mujeres, madre e hija, que le entregaron la bolsa al reciclador.
La Alcaldía de Medellín expresó su voz de repudio por el la forma en que murió esta menor y anotó que la muerte de cualquier persona, en especial la de un niño, representa un golpe a la esperanza y conlleva a renovar un llamado a la reflexión sobre la trascendental tarea de todos los ciudadanos por la defensa de la vida.
El secretario de Seguridad de Medellín Arnulfo Serna, informó que las víctimas fueron Santiago Andrés Tangarife Arrubla, de 19 años, y un menor, de 17 años de edad.
Familiares de las víctimas indicaron que, según las primeras versiones que conocieron de testigos del hecho, los jóvenes fueron subidos a un vehículo del que no les dieron las características, cuando se encontraban en la calle 82 con la calle 50D.
"Es un caso extraño, sobre todo por la forma como fueron muertos porque ni siquiera les han encontrado las cabezas, ya que nunca manifestaron que tuvieran amenazas de muerte", dijo un allegado que pidió la reserva de su nombre.
Anotaron que fueron reconocidos el domingo en la morgue de Medicina Legal por un primo del menor quien llegó hasta allí a averiguar por ellos.
Neonato muerto
De otra parte, en la carrera 77 con calle 31, a un costado del parque del barrio Belén, un reciclador encontró, en una bolsa, a un neonato muerto de sexo femenino. Según las autoridades que diligenciaron el levantamiento del cadáver, se trataba de una niña que ya tenía nueve meses de gestación.
Por este hecho la Policía inició las pesquisas para judicializar a dos mujeres, madre e hija, que le entregaron la bolsa al reciclador.
La Alcaldía de Medellín expresó su voz de repudio por el la forma en que murió esta menor y anotó que la muerte de cualquier persona, en especial la de un niño, representa un golpe a la esperanza y conlleva a renovar un llamado a la reflexión sobre la trascendental tarea de todos los ciudadanos por la defensa de la vida.