Después de remover varios derrumbes que descargaron unos 40.000 metros cúbicos de material sobre la carretera Medellín-Bogotá, en el sector de Samaná, en San Luis, y que la tuvieron cerrada ocho días, en la tarde de ayer se restableció el paso de vehículos.
El director Técnico de Devimed, John Jairo Otálvaro, dijo que la reapertura fue posible dos días antes de lo previsto, gracias a la disposición de maquinaria especializada de los socios de la concesión y de la entrega del equipo humano.
El ingeniero recomendó a los viajeros respetar las instrucciones porque la vía en el kilómetro 72 "no queda en condiciones perfectas" y expuesta a desprendimientos menores, pero que en el lugar permanecerán plantas eléctricas, maquinaria y personal las 24 horas para atender cualquier eventualidad. "Tenemos el compromiso de habilitarla en forma segura para garantizar el alto tráfico por Semana Santa", dijo.
Por las vías alternas de Manizales y Puerto Berrío, el viaje tardaba cuatro horas más.
El director Técnico de Devimed, John Jairo Otálvaro, dijo que la reapertura fue posible dos días antes de lo previsto, gracias a la disposición de maquinaria especializada de los socios de la concesión y de la entrega del equipo humano.
El ingeniero recomendó a los viajeros respetar las instrucciones porque la vía en el kilómetro 72 "no queda en condiciones perfectas" y expuesta a desprendimientos menores, pero que en el lugar permanecerán plantas eléctricas, maquinaria y personal las 24 horas para atender cualquier eventualidad. "Tenemos el compromiso de habilitarla en forma segura para garantizar el alto tráfico por Semana Santa", dijo.
Por las vías alternas de Manizales y Puerto Berrío, el viaje tardaba cuatro horas más.