Pese a los controles, persiste la fabricación en zona rural de este municipio.
Luego de la tragedia, el olor a pólvora se dispersó entre los ranchos de la vereda Salinas, de Caldas, y se quedó en el aire por horas. Los artefactos explosivos que le dieron el sustento a Edward Quintero, la mayor parte de sus 43 años, terminaron por quitarle la vida en una detonación que se sintió incluso en casas distantes, sobre el margen de la carretera a Amagá.
"Yo estaba dormido y la explosión sacudió la tierra", sostuvo Hernán Suaza, habitante de la vereda, que acudió a ver lo ocurrido. Corriendo por la carretera destapada confirmó su primera sospecha de un incidente en una de las fábricas clandestinas que funcionan en el sector.
Según el secretario de Gobierno de Caldas, Fernando Vergara, Quintero era el propietario de la polvorería que explotó ayer a las 9:30 de la mañana. Por mucho que familiares y compañeros se esforzaron por tapar con cobijas la visión de la propiedad desde la reja exterior, no pudieron ocultar la destrucción del improvisado taller que tenían a escasos metros de la casa.
El funcionario confirmó que en el incidente resultó lesionada una mujer, afectada por la caída de un muro. Un hombre que salió a avisar de lo ocurrido a bordo de una moto sufrió un accidente que le causó lesiones leves, según el testimonio de un vecino en el lugar de los hechos.
Por decreto de la Alcaldía, en Caldas está prohibida la fabricación, venta, transporte y manipulación de pólvora, según precisó Vergara.
Al finalizar la tarde de ayer la gerente de Salud Pública de Antioquia, Zulma del Campo Tabares, reportó que llegó a 154 el número de quemados con pólvora en Antioquia. Aunque la cifra de este año es menor en 12 casos que el parcial del año pasado a la misma fecha, cada día se reportan nuevos incidentes.
De la afectación en el departamento por el uso de la pólvora, 79 casos son de menores de edad. Un total de 76 personas se han lesionado en Medellín.
El gobernador, Sergio Fajardo, admitió que la pólvora es un tema que le ha dejado frustración. "Hacemos campañas, explicamos... siendo alcalde de Medellín, no sé cuánto tiempo y energía le dedicamos y no hemos logrado que la gente entienda algo muy elemental: que la pólvora es muy peligrosa".
Por la manipulación de pólvora se registran este año en el departamento ocho personas con amputación de falanges de las manos, entre ellas un menor de nueve años de edad.
PARA SABER MÁS
TONELADAS DE PÓLVORA INCAUTADAS
El secretario de Gobierno de Medellín, Jorge Mejía, presidirá hoy en Altavista la destrucción de una tonelada de pólvora incautada en la ciudad este diciembre. Su homólogo de Caldas dijo que en su municipio han incautado cuatro toneladas en 2012. La teniente Gladys González, comandante de bomberos en Caldas, reconoció que en la zona funcionan varias polvorerías pese a los controles.