Un contratista de Empresas Públicas de Medellín muerto y dos heridos, fue el resultado de un aparente acto de intolerancia en el barrio Belén La Palma, del occidente de Medellín.
De acuerdo con información policial, los empleados arribaron a la zona a las 3:00 p.m. del pasado jueves, con el fin de atender la reclamación de una vecina que aseguraba que la factura de los servicios públicos se le había incrementado de forma inusual.
Según las primeras indagaciones, los contratistas detectaron que otro residente tenía una conexión fraudulenta de energía con la de la reclamante y procedieron a cortar los cables. Esto generó una disputa verbal con la persona que estaba conectada ilegalmente.
Los trabajadores terminaron su labor y regresaron al vehículo, en la calle 27 con la carrera 80. Antes de encenderlo, apareció un hombre en una bicicleta y les hizo varios disparos. En el puesto del copiloto murió John Fredy Marín Pamplona, de 41 años, y coordinador del equipo de contratistas, víctima de disparos en la cabeza.
El conductor César Augusto Ramírez quedó lesionado en una oreja y el operario Luis Alejandro Rodríguez, que estaba en la silla de atrás, sobrevivió con impactos en un brazo y la cabeza.
La comunidad señaló a la Policía que el agresor, al parecer, había sido el vecino al que le cortaron la conexión ilegal de energía. Los uniformados registraron su residencia, pero no encontraron arma alguna. Luego, lo trasladaron a la Unidad de Reacción Inmediata en el búnker de la Fiscalía, donde le practicaron una prueba de absorsión atómica para determinar si había disparado (el análisis rastrea señales de pólvora en la mano).
Como el resultado no es inmediato, lo dejaron en libertad mientras avanza la investigación. A su salida de la sede judicial, según personas cercanas al caso, el sospechoso de 38 años dijo con cierto pesar que ya no lo iban a ver más, "porque el mundo se va a acabar".