La normalidad con la que se desarrolló buena parte de la marcha de transportadores por las calles del centro de Medellín, en la mañana de este lunes, se vio alterada cuando los integrantes del Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) utilizaron gases lacrimógenos y artefactos aturdidores para dispersar la marcha e impedir su acceso a La Alpujarra.
En los hechos resultaron con heridas leves varias personas, entre ellas un niño y dos adultos, que reciben atención médica en el Hospital General y en la Clínica CES. Uno de los adultos es operado a esta hora.
La movilización, que comenzó a las ocho de la mañana desde el Teatro Pablo Tobón Uribe, bloqueó durante 50 minutos La Playa con la avenida Oriental, lo que causó una gran congestión en las vías del centro de la capital antioqueña.
Tras ello, llegaron al Centro Administrativo de La Alpujarra, donde hizo presencia el Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) para evitar posibles incidentes. Allí, precisamente, subieron los ánimos.
Se pudo establecer que una comisión de transportadores se reunirá con funcionarios de la Alcaldía de Medellín, tal y como lo solicitaba el gremio, para abordar sus inquietudes. Se desconoce si en la cita estará el mandatario local, Aníbal Gaviria.
Se unen en Robledo
Cerca de 220 buses que cubren varias de las rutas del sector de Robledo se sumaron este lunes a la jornada de paro que adelantan los transportadores en la capital antioqueña.
La intención del gobierno municipal de sacar 35 rutas de Medellín y el retiro de los vehículos sin ningún incentivo para los propietarios son las razones por las cuales los conductores de esta zona de la ciudad se unieron al cese de actividades, según dijo a elcolombiano.com John Soto, uno de los conductores que hace parte de la jornada de protesta.
La parálisis en el servicio de este grupo de transportadores resultó un poco sorpresiva, pues el paro anunciado para este lunes en el centro de Medellín comprometía a un grupo de conductores de la zona centro oriental de Medellín.
En Robledo se unieron al paro cerca de 220 vehículos que prestan su servicio en las rutas 251 Margaritas, 250 A La Campiña, 250 Metrosit, 253 Metro, 250 Robledales, 285 y 282.
Zona centrooriental y parte de Robledo, sin servicio de transporte público
Además de la marcha de protesta por las medidas para el reordenamiento del transporte público de Medellín, que, según los transportadores, los va a sacar de un negocio en el que llevan más de 60 años y va a dejar sin empleo a muchos de los conductores que hoy prestan el servicio, gran parte de la zona centrooriental y algunos sectores de Robledo, especialmente Aures y Villaflora, se quedaron sin transporte público durante toda la mañana y parte de la tarde.
Lo que dice la administración
El compromiso del secretario de Movilidad de Medellín, Ómar Hoyos, frente al cese de actividades de transportadores es "garantizar que el servicio público se preste como debe ser". El secretario Hoyos reiteró que el 80 por ciento de las empresas que operan en Medellín no acatará el llamado. "Me he reunido con la mayoría de transportadores y me manifestaron que seguirán hablando con la administración".
Explicó que todas las medidas y decisiones que se están tomando obedecen a un reordenamiento del transporte público de Medellín, que necesita urgentemente que el sistema empiece a funcionar.
Según la Asociación de Transporte Colectivo del Valle de Aburrá (Asotransvaa), "el proyecto de Transporte Público Medellín entrará en vigencia a partir del 2015 y eliminará más de 35 empresas y sacará de circulación 2500 buses, con lo que afectará la economía local de miles de familias que viven directa o indirectamente del transporte".
Juan Gonzalo Merino, presidente de Asotransvaa, sostiene que este y otros proyectos, como la pretroncal de la Avenida Oriental, perjudica "considerablemente al sector y a todas las personas que viven directa o indirectamente del transporte de servicio público colectivo en el Valle de Aburrá y están condenando a la quiebra a miles de transportadores tradicionales del municipio".
A estas inquietudes, el secretario Hoyos respondió que no es cierto que haya un plan de expropiación, al contrario, que hubo licitaciones para que las empresas operen las rutas alimentadoras en Belén y en Aranjuez, además, con buses de precios muy buenos y responsables con el medio ambiente.
"Medellín no puede estar expuesta al chantaje de 4 o 5 mil propietarios de buses, que les dé la gana de parar la ciudad, en muchas ocasiones por órdenes de personajes oscuros", concluyó Hoyos, quien agregó que la Administración sigue abierta a conversar.